La iluminación espiritual

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Citas Soy


Todo lo que soy, y espero ser, se lo debo a mi madre.

Todo lo que soy y espero ser, se lo debo a la angelical solicitud de mi madre.

Todo lo que soy, o espero ser, se lo debo a la angelical solicitud de mi madre.

Ya no soy ni esto ni aquello, solo lo supremo, el que lo ilumina todo; en verdad soy la existencia, el primero sin segundo, puro, carente de exterior e interior, infinito.

Soy Sat-citt-ananda independiente, autor resplandeciente, libre de la dualidad. Esto se conoce como (el segundo genero de) savikalpa-samadhi asociado con el sonido (subjetivo).

Yo soy el, la Entidad Una en cuya presencia vital, el cuerpo, los sentidos y los Pranas ―que son inertes― parecen ser conscientes y dinámicos, como si ellos fuesen el Si-mismo.

Cuando, en base a lo anterior, se comprende la identidad mutua entre las dos palabras Tu y Eso, la idea de Yo no soy Brahmán contenida en la palabra Tu desaparece inmediatamente.

Siempre soy libre de elegir, y elegir de nuevo.

Soy parte de la cadena de sentirme bien.

Soy un amante. Soy una extensión física de la pura y positiva energía del amor.

Controlo mis pensamientos, Controlo la forma en que me siento, y soy realmente libre.

Soy un conocedor impresionante. Disfrute de la belleza de la vida. Aplaudo todo lo que atraigo.

Yo soy el, el Uno inmutable, el Si-mismo mas intimo que mueve el intelecto, etc.; al igual que lo hace un imán con las limaduras de hierro.

Yo soy el Uno por cuya sola estampa las entidades inertes como el organismo y los sentidos son capaces de operar por la aprobación y el rechazo.

Una y otra vez me postro ante los pies de mi Maestro, por cuya gracia he venido a darme cuenta de que solo Yo soy la Esencia Omniabarcante y de la que todo el mundo de la multiplicidad es una sobre-imposición en Mi-mismo.

Hasta que no se alcance la experiencia directa de Yo soy Brahmán debemos vivir valores de auto-control, etc., y practicar la escucha de maestros, la lectura de la Escrituras, y reflexionar y meditar diariamente sobre esas ideas.

Cuando no estoy pensando en mi, ¿que soy?

Solo algo tan loco como el ser humano alguna vez se preguntaría si soy bueno. No hay robles que tengan una crisis existencial. Me siento tan podrida por mi mismo. No produzco tantas bellotas como la que esta a mi lado.

Ve al yo puro SOY. No soy esto o lo soy, pero simplemente soy. Entonces tira el I, para que solo haya AM. Este es el estado apátrida, el principio ultimo, el yo absoluto. Todo, en esencia, es este principio absoluto llamado el yo.

La pregunta mas intima que podemos hacer, y la que tiene mas poder espiritual es la siguiente: ¿Que o quien soy yo?

Esta luz que soy no es una luz ordinaria. No ilumina nada ni ilumina la oscuridad. Es un conocimiento puro y sin forma.

No soy una persona particularmente oscuro. Tengo mis momentos, es cierto, pero tengo un sentido del humor.

Nunca he estudiado nada formalmente. Me echaron de la escuela a la edad de 17, así es que soy un autodidacta, que es una palabra que me he enseñado a mi mismo.

Debido a que yo soy yo, me resulta muy difícil juzgar que tan fascinante podría ser escuchar durante dos horas mi tono nasal y con acento tan marcado para alguien que no fuese yo.

Soy un no creyente profundamente religioso: es un nuevo tipo de religión.

Tengo que estar dispuesto a abandonar lo que soy para convertirme en lo que seré.

Soy lo suficientemente artista como para dibujar libremente en mi imaginación.

No tengo un talento especial. Solo soy apasionadamente curioso.

Soy un no creyente religioso: es un nuevo tipo de religión.

No soy solo un pacifista, sino un militante pacifista. Estoy dispuesto a luchar por la paz. Nada terminara la guerra a menos que las personas se nieguen a ir a la guerra.

Eres mucho mas de lo que soy y hacia donde voy, cuando me voy… Amor, inalterable amor, mi luminoso gran amor.

Hasta ahora solo fui lo que soy, aprendiz de Quijote; he podido luchar y hasta a veces ganar sin que se pierda el bigote.

Mas allá de cualquier ideología, mas allá de lo sabio y lo profano, soy parte del espacio, soy la vida, por el hecho de ser un ser humano.

El sentido que mas me ha conquistado desde que soy ciego es el olfato.

Soy un conde, no un santo.

Soy fuerte contra todo, excepto contra la caída de aquellos a quienes amo. El que muere gana; el que ve a otros morir, pierde.

Lo que mas he amado después de ti, soy yo mismo: es decir, mi dignidad y esa fuerza que me hicieron superior a otros hombres. Esa Fortaleza era mi vida. Lo has roto con una palabra, así que debo morir.

Oh. Soy un miserable. ¿Por que no aprendí a nadar?

El sexo y dormir solo, me hacen consciente de que soy mortal.

Eso haría yo, si fuera Armenio. Sin embargo, soy Alejandro, por lo que enviare a Darío otra resolución. Porque así como el cielo no tiene dos soles, Asia tampoco puede tener dos reyes.

Si fuera Perdices, no te voy a mentir, habría aceptado esta propuesta a la primera. Pero soy Alejandro, así que no lo hare.

¿Lo ven, amigos míos? Es sangre. Es sangre humana. Soy humano y no divino lo expreso después de haber sido herido por una flecha enemiga.

Una clave importante: no vivamos el como soy; busquemos que soy; y después, quien soy.

En la medida que descubro lo que Soy, veo también lo que no soy. Entonces adquiero poder sobre esto que no soy el personaje o una serie de ellos.

Nada de lo que se diga de mi, lo Soy.

Yo soy más yo, allí donde soy inteligencia, soy atrevimiento y soy amor. Y eso que soy, lo soy como un punto focal de algo más grande.

Debo, luego soy.

Soy enormemente susceptible a los ambientes religiosos: la música, la liturgia y las oraciones.

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