La iluminación espiritual

Frases Abraham Lincoln

Citas Abraham Lincoln


El hombre nunca ha encontrado una definición para la palabra libertad.

Yo no se quien fue mi abuelo. Me importa mucho mas saber quien será su nieto.

Voy despacio, pero jamás desando lo andado.

Los que niegan la libertad a los demás no se la merecen ellos mismos.

A todo el mundo le agrada una lisonja.

Todos los hombres nacen iguales, pero es la ultima vez que lo son.

Entre el amor y la violencia, siempre acaba triunfando el amor.

La lucha y desesperación por conseguir un empleo publico, buscado una forma de vivir sin trabajar, probara finalmente la fortaleza de nuestras instituciones.

Los dogmas del pasado sereno no concuerdan con el tumultuoso presente.

Quien carece de vicios, carece de virtudes.

La inteligencia, el patriotismo, la religión y una firme confianza en ese Dios tan poderoso que siempre dispenso sus favores a ese país, es todo cuanto necesitamos para resolver satisfactoriamente nuestras diferencias.

Casi todos podemos soportar la adversidad, pero si queréis probar el carácter de un hombre, dadle poder.

Recuerdo las oraciones de mi madre y me han perseguido toda la vida. Se han aferrado a mi toda la vida.

Tengamos fe en que el derecho constituye la fuerza.

Todo lo que soy, y espero ser, se lo debo a mi madre.

La nación es mas fuerte por la unidad de sus hijos y los miembros de la familia que por su poderío militar.

Tengamos fe que la razón es poderosa; y con esa fe, avancemos hasta el fin, haciendo la parte que nos toca, persiguiendo siempre la verdad.

Los principios importantes pueden ser flexibles.

Pueblo que ignora su historia, pueblo que esta condenado a repetirla.

Del mismo modo que no seria un esclavo, tampoco seria un amo. Esto expresa mi idea de la democracia.

Casi todas las personas son tan felices como se deciden a serlo.

Al no querer ser esclavo, tampoco quiero ser amo.

Si quieres ganar un adepto para tu causa, convéncelo primero de que eres su amigo sincero.

Suavizar las penas de los otros es olvidar las propias.

Mas vale ceder el paso a un perro que dejarse morder por el.

Es difícil hacer a un hombre miserable mientras sienta que es digno de si mismo.

Quien tiene el derecho de criticar debe tener el corazón para ayudar.

Me gustan los sombreros. No lo desmentiré.

Todo lo que soy, o espero ser, se lo debo a la angelical solicitud de mi madre.

Ningún hombre que tenga una madre piadosa es pobre.

La democracia es el gobierno del pueblo, por el pueblo y para el pueblo.

Es mas fácil contraer el primer capricho que satisfacer los otros que le siguen.

Los que niegan la libertad a otros, no la merecen para si; porque bajo un Dios justo no pueden conservarla por mucho tiempo.

Hay momentos en la vida de todo político, en que lo mejor que puede hacer es no despegar los labios.

Si pudiéramos saber primero en donde estamos y a donde nos dirigimos, podríamos juzgar mejor que hacer y como hacer las cosas.

Nadie tiene la memoria suficiente para mentir siempre con éxito.

Una gota de miel caza mas moscas que un galón de hiel.

La mas estricta justicia no creo que sea siempre la mejor política.

Tiene derecho a criticar, quien tiene un corazón dispuesto a ayudar.

Un estado en el que coexisten la libertad y la esclavitud no puede perdurar.

Mejor es callar y que sospechen de tu poca sabiduría que hablar y eliminar cualquier duda sobre ello.

Ha sido mi experiencia, que gente que no tiene vicios tiene muy pocas virtudes.

Una papeleta de voto es mas fuerte que una bala de fusil.

Si la esclavitud no es injusta, entonces no hay nada injusto.

Medir las palabras no es necesariamente endulzar su expresión, sino haber previsto y aceptado las consecuencias de ellas.

Ningún hombre es demasiado bueno para gobernar a otro sin su consentimiento.

Todo lo que soy y espero ser, se lo debo a la angelical solicitud de mi madre.

No somos enemigos, sino amigos. No debemos ser enemigos. Si bien la pasión puede tensar nuestros lazos de afecto, jamás debe romperlos. Las místicas cuerdas del recuerdo resonaran cuando vuelvan a sentir el tacto del buen ángel que llevamos dentro.

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