La iluminación espiritual

Frases Vashistha

Citas Vashistha


No me preocupa la idea de la vejez o de la muerte, ni la obtención de la felicidad, ni pienso en unas cosas como mías y en otras como no mías.

Disfruto con los que son felices y sufro con los que sufren, porque soy amigo de todos y se que no pertenezco a nadie ni nadie me pertenece a mi.

Mi mente no se siente satisfecha por haber conseguido algo ni se deprime cuando siente algo desagradable: esa es la causa de mi estado saludable y dichoso.

Se que en todo momento todas las cosas no son mas que la conciencia cósmica no dual. Ese es el secreto de mi estado envidiable y feliz.

Mi estado es el fruto de la contemplación del momento de la unión del plana y el apaña, que es el momento en el que se revela el ser.

En esencia para ser real debes cuestionar lo irreal una y otra vez hasta que desaparezca.

Ni la fortuna ni la adversidad me perturban cuando se plantan ante mi, porque las considero con una visión ecuánime, como considero uno de mis brazos igual al otro.

Soy consciente del substrato común de todas las cosas y no me atormento con pensamientos sobre lo que voy a hacer dentro de un momento o lo que me ocurrirá mañana.

Nada de lo que hago esta manchado por el deseo o por el lodo del sentimiento del ego, no me sube a la cabeza el poder ni me humilla la pobreza.

En esencia si vas a tu interior tendrás conciencia de ti mismo, de tu omnipresencia pura.

En ningún momento y en ningún lugar alabo ni censuro a nadie, ni a mi mismo.

Sin calcular lo que es o lo que no es, lo deseable o lo indeseable, permanezco en el ser y soy feliz, sano, libre de toda angustia y de toda preocupación.

Hago lo que hay que hacer en cada momento, sin pensar en los resultados de mi acción.

Se que soy el mundo con todos sus acontecimientos y toda su inteligencia y este es el secreto de mi longevidad.

Asumo la suprema renunciación, habiendo renunciado incluso al deseo de vivir y en consecuencia mi mente permanece equilibrada y apacible sin alimentar expectativas de ningún tipo.

No contemplo ni el pasado ni el futuro: mi atención esta constantemente dirigida hacia el presente.

No alimento vanas ideas de alcanzar esto o librarme de aquello.

Jamás pienso que soy este cuervo, aunque permanezco ocupado en las tareas propias de mi condición animal, porque se que esta apariencia objetiva es ilusoria y la vivo como si fuera un largo sueño.

No tengo esperanzas ni expectativas y hasta la cosa mas vieja y desgastada la miro con ojos frescos, como si fuera nueva.