La pasión y la paciencia se enfrentan
Que pasa cuando la pasión y la paciencia se enfrentan. John Bunyan en su libro «El Progreso del Peregrino» nos relata el sueño donde estas se afrontan.
JOHN BUNYAN
PASIÓN Y PACIENCIA
Puedes mostrar paciencia y sabiduría permaneciendo tranquilo, incluso cuando la pasión o los impulsos te piden que actúes. John Bunyan
PASIÓN
Dice el Buda: Examina la naturaleza de la pasión. Observa el movimiento de la pasión, es muy sutil, y verás dos cosas. Una es que la pasión, por su propia naturaleza, es incolmable, y segunda, en el momento en que comprendes en que la pasión es incolmable, esta desaparece y te quedas sin pasión. Ese es el estado de paz, silencio, tranquilidad. Ese es el estado de satisfacción. El ser humano nunca alcanza la satisfacción a través de la pasión, el ser humano alcanza la satisfacción, solo al trascender la pasión.
Has de examinar la pasión; ni aquí ni en ninguna otra parte, la pasión se ha visto nunca colmada ni satisfecha. Nunca ha sucedido ni nunca sucederá, porque va contra la naturaleza propia de la pasión. La pasión no puede ser colmada, porque su misma naturaleza es quedar insatisfecha y proyectarse en el futuro. Siempre está en el horizonte, al cual nunca llegarás ya que llegues a donde llegues verás que el horizonte ha retrocedido. Y la distancia entre tu y el horizonte seguirá siendo exactamente lo mismo.
PACIENCIA
Hemos olvidado como esperar, es casi un asunto olvidado. Y nuestro tesoro mas grande consiste en ser capaces de esperar el momento apropiado. Toda la existencia espera el momento apropiado.
Hasta los arboles lo saben: cuando ha llegado el momento de florecer y cuando ha llegado la época de dejar caer todas las hojas y permanecer desnudos frente al firmamento. Ellos todavía son hermosos en esta desnudez, esperan el nuevo follaje con una gran confianza en que lo viejo se ha ido pero lo nuevo vendrá pronto y las nuevas hojas empezaran a crecer.
Hemos olvidado como esperar, lo queremos todo de prisa. es una gran perdida para la humanidad… En el silencio y la espera algo dentro de ti continua creciendo: tu ser autentico.
Y un día esto salta y se convierte en una llama y toda tu personalidad se hace pedazos: eres un hombre nuevo. Y este hombre nuevo sabe lo que es la ceremonia, este hombre nuevo conoce la savia eterna de la vida.
Veamos el sueño de John Bunyan sobre la pasión y la paciencia...
Nota: El Progreso del Peregrino escrito por John Bunyan figura entre los mayores clásicos de la literatura mundial. Durante mucho tiempo, fue, después de la Biblia, el libro más vendido en el mundo.
UN SUEÑO DE JOHN BUNYAN
John Bunyan en su libro El progreso del peregrino, en el capítulo 5, nos trae uno de sus sueños sobre la pasión y la paciencia...
Vi también en mi sueño que el INTÉRPRETE tomó a CRISTIANO de la mano, y le condujo a un pequeño cuarto donde estaban dos niños, sentados cada uno en su silla. El nombre de uno era Pasión, y el del otro Paciencia. Pasión parecía estar muy descontento, mas Paciencia estaba muy tranquilo.
Entonces preguntó CRISTIANO — ¿Por qué no está contento Pasión?
El INTÉRPRETE contestó diciendo — El encargado quiere que Pasión espere hasta el principio del año venidero para recibir sus mejores cosas; mas Pasión todo lo quiere al momento. Paciencia al contrario, está resignado a esperar.
Luego vi que vino un hombre a Pasión y le trajo un saco de tesoros y lo vació a sus pies, y el niño los recogió con gusto y se divirtió con ellos, haciendo burla al propio tiempo de Paciencia. Más vi que en poco tiempo todo lo había desperdiciado y no le quedaron más que andrajos.
CRISTIANO — Explíqueme usted, señor INTÉRPRETE, el significado de esto.
INTÉRPRETE — Estos dos muchachos son figuras: Pasión, de los hombres de este mundo, y Paciencia de los del venidero; porque como has visto que Pasión todo lo quiere en este mismo año, es decir, en este mundo, así son los hombres mundanales; quieren gozar de todas sus cosas buenas en esta vida y no pueden esperar hasta la vida venidera. Aquel dicho: Un pájaro en la mano vale más que cien volando, les es de más autoridad que todo el testimonio Divino sobre los bienes del mundo venidero. Mas como viste que él pronto malgastó todo, y nada le quedó sino andrajos, lo mismo sucederá con tales hombres en el fin de este mundo.
CRISTIANO — Veo que Paciencia tiene la mejor sabiduría, y eso por dos razones: primero, porque espera para recibir sus cosas buenas; y segundo, porque él recibirá sus tesoros cuando el otro no tendrá más que andrajos, por haber malgastado lo que tenía.
INTÉRPRETE — Y bien puedes agregar otra razón, a saber, la gloria del mundo venidero nunca se acabará; mientras que los bienes de este mundo se desvanecerán pronto.
Por lo tanto Pasión, aunque recibió sus buenas cosas desde luego, tenía menos razón de reírse que Paciencia, puesto que este recibirá sus tesoros al fin. Así el primero tiene que ceder paso a lo que viene después, cuando llegue la hora; mas lo que es último no cede paso a nada; porque nada hay que le siga.
Por esta razón el que recibe su parte al último de todos, lo tendrá para siempre. El que tiene su porción al presente, con el tiempo la va gastando hasta que no le queda nada; el que tiene al fin, la tendrá para siempre, porque no habrá más tiempo que se la gaste. Así se dijo al rico avariento: Hijo, acuérdate que recibiste tus bienes en tu vida, y Lázaro también males; mas ahora él es consolado aquí y tú atormentado.
CRISTIANO — Según esto no es lo mejor afanarse por las cosas presentes, sino poner la esperanza en las venideras.
INTÉRPRETE — Esa es la verdad: Las cosas que se ven son temporales; mas las que no se ven son eternas. Pero sucede, desgraciadamente, que teniendo tanta conexión entre sí las cosas presentes y nuestros apetitos carnales, se hacen muy pronto amigos; lo cual no pasa con las cosas venideras, que están a tanta distancia del sentido de la carne.
LA CONCLUSIÓN
VERSIÓN ORIGINAL
Ya, lector, que mi sueño he referido,
interpretarlo para ti procura,
y explícale a quien puedas su sentido.
Mas muestra en entenderlo tu cordura,
pues te daña si es mal interpretado;
Mas si lo entiendes bien es tu ventura.
Lo exterior de mi sueño, ten cuidado,
que no te preocupe en demasía,
como si fuera cosa de tu agrado.
Ni risa ni furor ni alegría,
te cause cual a niño o demente,
mira bien su sustancia y su valía.
Aparta la cortina, y fijamente...
mira lo que se esconde tras mi velo:
es cosa que te anime y que te aliente.
Al leer este símil, sin recelo,
tira la escoria, toma el oro puro,
y colmado verás así tu anhelo.
El oro está con mineral impuro.
VERSIÓN ADAPTADA
Lector, mi historia te he contado;
a ver si a mí me la puedes interpretar.
O a ti mismo, o a tu prójimo: pero ten cuidado
de no interpretarlo mal, porque si eso sucede,
en lugar de hacer un bien, un mal harás:
porque iniquidad generas interpretándola mal.
Cuídate también, de al extremo ir,
y con los detalles de mi sueño jugar;
Ni dejes que mis ilustraciones o comparaciones,
a risa te muevan o a vanamente discutir.
Deja eso para los muchachos y los necios;
Pero tú, ¿La sustancia de mi tema captas?
Abre las cortinas, detrás de ellas mira,
mis metáforas busca, y en esto no vayas a fallar,
si las quieres encontrar, a tu mente sincera,
provechosas le serán.