Reflexiones del aborto

Cuatro hijos, uno es ciego, otro es sordo, otro murió y otro tiene tuberculosis. Madre embarazada de nuevo. Recomendarías el aborto en está situación.

OSHO

NO AL ABORTO

Dios sabe perfectamente que llevas vida dentro de tu vientre.

Ludwig Van Beethoven

El padre es asmático, la madre tuberculosa. Tienen cuatro hijos, el primero es ciego, el segundo es sordo, el tercero murió y el cuarto tiene tuberculosis. La madre está embarazada de nuevo. ¿Recomendarías el aborto en esta situación?

Si tu decisión es afirmativa, hubieras evitado que el mundo conociera a Ludwig Van Beethoven.

Ethel Walters

Un hombre blanco viola a una niña negra de 13 años y ésta queda embarazada. Si fueras el padre de esta joven. ¿Recomendarías el aborto en esta situación?

Si tu decisión es afirmativa, jamás hubiera nacido Ethel Walters, una de las cantantes negras más famosas de toda la historia.

John Wesley

Un predicador y su esposa con graves problemas económicos (son realmente pobres) ya tienen 14 hijos. Considerando su extrema pobreza. ¿Recomendarías el aborto en esta situación?

Si tu decisión es afirmativa, el mundo no hubiera podido escuchar a John Wesley (Vegetariano), uno de los predicadores más grandes de todos los tiempos.

Jesús de Nazaret

Una joven está embarazada; no está casada y su prometido no es el papá del niño que está esperando. ¿Recomendarías el aborto en esta situación?

Si tu decisión es afirmativa, hubieras impedido que María trajera al mundo el regalo más precioso de toda la humanidad: JESÚS (Vegetariano)

CONCLUSIÓN

Las leyes de los hombres te amparan, puedes ir a un hospital a practicarte un aborto, es muy simple y además nadie te va a preguntar nada, quizás ni tu nombre. Pero considera: Dios sabe perfectamente que llevas vida dentro de tu vientre. No mates a quien puede ser un regalo para toda la humanidad.

Osho, ¿Qué opinas del aborto?

El aborto no es un pecado; en este mundo superpoblado es una virtud. Y si el aborto es pecado, entonces el Papa polaco, la madre Teresa y compañía son los responsables, porque están en contra de los anticonceptivos, están en contra de los métodos de control de la natalidad, están en contra de la píldora. Esa es la gente causante de todos los abortos, ellos son los responsables. ¡En mi opinión son grandes criminales!

¡En este mundo superpoblado, en el que hay gente hambrienta muriéndose, estar en contra de la píldora es simplemente imperdonable! La píldora es una de las contribuciones más significativas de la ciencia moderna a la humanidad, puede convertir la Tierra en un Paraíso.

Pero ciertamente en ese Paraíso no habrá huérfanos, y entonces ¿qué pasará con la madre Teresa y los misioneros de la caridad? Y en ese Paraíso ¿quién escuchará al Papa polaco? La gente será tan feliz, ¿a quién le va a importar esa gente? ¿Y quién pensará en un Paraíso después de la muerte? Si el Paraíso existe aquí y ahora, entonces no hay necesidad de inventar, proyectar, soñar, fantasear un Paraíso en el más allá.

Han fantaseado el Paraíso en el más allá porque hemos vivido en el infierno en esta Tierra.

Y este infierno les viene muy bien a los sacerdotes, a la gente que se llama religiosa, a los santos, a los papas, a todo tipo de ayatolás y shankaracharyas, a todos esos tipos de embaucadores. Todos ellos están en contra de la píldora. ¡Si tienen algo contra la píldora, entonces convertidla en polvo! ¡Si el problema es que sea una píldora, entonces trituradla! Encontrad alguna otra forma. Esa es la gente causante de los orfanatos, los abortos, y les viene muy bien. ¡Están haciendo un buen trabajo!

He oído algo sobre dos hermanos; solían tener un negocio. Su negocio era: uno de ellos entraba en un pueblo por la noche y ponía alquitrán en las ventanas y las puertas de la gente, y por la mañana se iba.

Por la mañana llegaba el otro hermano, gritando por las calles del pueblo: ¡Limpio el alquitrán! ¡Si alguien quiere que le limpien las ventanas, aquí estoy! Y por supuesto, tenía mucho trabajo, ¡todo el pueblo le necesitaba! Para cuando terminaba, el otro hermano ya había destruido las puertas y ventanas de algún otro pueblo, y entonces llegaba este otro hermano. ¡Les iba muy bien y estaban ganando mucho dinero!

Esto es lo que está haciendo esa gente. Estás en contra de la píldora, estás en contra de los anticonceptivos, estás en contra de la esterilización, estás en contra de todas las técnicas de control de la natalidad, y así, naturalmente, habrá abortos, habrá huérfanos y mendigos. Entonces les puedes servir y ganar grandes virtudes, porque sin servicio nunca irás al cielo.

Esa pobre gente es necesaria como trampolín para que tú vayas al cielo.

A mí me gustaría destruir la pobreza, no quiero ayudar a los pobres. ¡Ya basta! Durante diez mil años los tontos han estado ayudando a los pobres; no ha servido de nada. Pero ahora tenemos la tecnología suficiente para destruir la pobreza por completo.

Así que si hay que perdonar a alguien es a esta gente. Es al Papa, a la madre Teresa, etcétera, a quienes hay que perdonar. Son criminales, pero su crimen es de una naturaleza tal que se necesita mucha inteligencia para comprenderlo.

La reproducción

¿Es verdad que consideras pecaminoso el sexo encaminado a la reproducción? He leído también tus palabras diciendo que el mayor acto creativo de una mujer es producir un niño, y que existe una gran diferencia entre una madre y una mujer. Si esto es así, ¿hay entonces pecado en participar en el sexo y en el amor con la esperanza de crear un niño y sentir la alegría de la creación y la energía renovadora del Universo?

Sí, hasta ahora el mayor acto creativo de una mujer ha sido dar a luz a un niño, pero ya no va a ser así. La Tierra no estaba tan poblada en el pasado; era una necesidad, una gran necesidad, y la mujer la satisfizo. Pero ahora ella tiene que crecer a nuevas dimensiones de la creatividad, y solo entonces será capaz de ser igual que el hombre. De otra forma, en el pasado ha sido tan solo una fábrica y el hombre la ha utilizado para crear más niños. Tener más niños era beneficioso económicamente, era un negocio, porque te ayudaban de todas las maneras posibles; en el pasado no eran una carga.

En los países pobres aún perdura la idea de que cuantos más hijos tengas mejor te irá económicamente. En el pasado eso era verdad, hoy día es absolutamente falso. Mahoma se casó con nueve mujeres y permitió que los musulmanes se casaran con cuatro mujeres simplemente para crear más musulmanes, porque había una guerra continua entre los musulmanes y los no musulmanes y era una cuestión de poder, la política de los números. De forma que era importante económica y políticamente que los hombres se casaran con más mujeres, y la gente robaba mujeres de las demás tribus. Era más importante robar una mujer que un hombre, porque el hombre no es tan reproductivo; un hombre es suficiente para servir a muchas mujeres y un hombre puede producir muchos niños.

Pero ahora todo ha cambiado, el mundo está superpoblado. Ahora lo que se necesita es desviar la creatividad de las mujeres a nuevas dimensiones: a la poesía, a la literatura, a la pintura, a la música, a la arquitectura, a la escultura, a la danza. Ahora habría que permitir a la mujer acceso a toda la gama de la creatividad.

Crear un niño ahora es peligroso. Superpoblar la Tierra ahora es suicida; ya somos más de los necesarios.

Dar a luz a niños ahora no es creativo, ¡es destructivo! Todo el contexto ha cambiado y tenemos que aprender nuevas maneras de vivir en un nuevo contexto. Y la mujer no podía crear gran poesía, gran música, gran arte, gran literatura; no podía ser científica, mística, no podía hacer nada, porque en el pasado estaba continuamente embarazada. Estaba mal nutrida, torturada por tantos hijos, docenas de hijos, siempre embarazada, enferma. Aún no había vivido totalmente, no tenía el tiempo suficiente para vivir.

Por vez primera, gracias a los anticonceptivos y los métodos de control de la natalidad y la esterilización, es posible que la mujer pueda liberarse de quedarse embarazada y de cargar innecesariamente con el gran peso de dar a luz a niños y luego criarlos.

Las energías de la mujer se pueden liberar. Ahora también ella puede llegar a ser un Buda, un Zaratustra, un Jesús, un Krisna. Ahora también ella puede crear como Mozart, Wagner, Leonardo da Vinci, Miguel Ángel, Shakespeare, Kalidas, Rabindranath, Tolstói, Chéjov, Gorki, Dostoievski.

Y mi impresión es: una vez que las energías de la mujer se liberen completamente de dar a luz a niños, ella será capaz de crear budas más grandes. ¿Por qué? Porque ella es una fuerza muchísimo más creativa que el hombre.

Pero su creatividad ha permanecido confinada a dar a luz a niños, y eso no es una gran creatividad, es solo biológica. Los animales lo están haciendo perfectamente bien, así que ¿qué tiene de grande? Dar a luz a un niño no es algo consciente, deliberado, meditativo. Simplemente estás siendo utilizada por la naturaleza, por la biología, como medio para propagar las razas, las especies.

Por eso hay un cierto fondo de culpabilidad en todos, incluso sin los sacerdotes. Los sacerdotes la han utilizado, la han explotado, pero no la han creado realmente. Hay una culpabilidad subyacente respecto al sexo; los sacerdotes la han aumentado muchísimo porque se convirtió en una gran fuente de explotación para ellos. Podían dominar al hombre con mucho más poder haciendo que se sintiera culpable.

Pero debe haber una causa dentro del hombre mismo; de otra forma, sin ningún fondo dentro de sí no se le puede imponer la culpabilidad desde fuera. El hombre la siente en lo profundo de sí: de manera sutil, de manera inconsciente sabe que el sexo no es algo consciente, es inconsciente; que es mecánico; que estás siendo utilizado como medio; que no tienes las riendas. Que es una fuerza biológica, que no eres tú realmente quien desea a una mujer o a un hombre, son solo las hormonas.

Y cuando sabes que estás siendo utilizado y te sientes incapaz de librarte de esta esclavitud, surge una culpabilidad, que no eres suficientemente hombre, que no tienes realmente las riendas, que eres un esclavo. El sexo es un acto animal.

Eso es lo que quiero decir cuando afirmo que el sexo encaminado a la reproducción es pecaminoso. La palabra pecado no la uso en ningún sentido moralista. Digo simplemente que es pecaminoso porque es inconsciente, no meditativo. Tú no estás haciéndolo, estás siendo forzado a hacerlo por ciertas fuerzas inconscientes. Eso es lo que quería decir cuando afirmé que el sexo encaminado a la reproducción es pecaminoso.

Ahora la Tierra ya no necesita más gente. Si lo que queremos es hacer un infierno de esta Tierra, entonces está bien, entonces seguid reproduciéndoos. Entonces escuchad al Papa y a la madre Teresa... Entonces escuchad a todos esos estúpidos que os dicen que evitéis los anticonceptivos, que evitéis el control de la natalidad, que evitéis la esterilización, porque son actos irreligiosos; que evitéis el aborto porque es muy inmoral.

Pero si evitas el aborto, si evitas los anticonceptivos, si evitas la esterilización, serás responsable del suicidio global y eso será realmente violento, y nos estamos acercando más a ello cada día. Esta es la primera razón por la que digo que el sexo para la reproducción es pecaminoso.

Pero el Papa, Mahatma Gandhi y los demás a los que llaman santos dicen que el sexo solo es moral si lo haces por razones reproductivas. En realidad, lo que están diciendo es que el sexo solo es bueno si es animal, porque los animales entran en el sexo solo por razones reproductivas.

Para mí, practicar el sexo por razones reproductivas es pecaminoso porque es animal, es inconsciente, es biológico.

Practicar el sexo por el puro gozo de compartir tu energía con cualquiera con quien tienes intimidad... es una manera de comunión energía a energía, corazón a corazón. Es disolverse y fundirse uno en otro... sin ningún otro motivo.

Si hay un motivo —que quieres crear un niño— entonces es un negocio. Si no hay motivo, si es una diversión sin propósito, solo entonces tiene belleza, y entonces no crea ninguna atadura. Y te estás liberando de la biología, te estás elevando sobre la biología, te estás elevando sobre los animales, estás alcanzando las cimas de la humanidad.

Así que, para mí, el sexo es bello solo cuando no tiene propósito, cuando es solo como un juego, cuando no lo haces con algún otro fin, cuando estar en comunión con una mujer o con un hombre por el puro gozo de estarlo es suficiente.

Entonces has trascendido la vida animal inferior y has entrado en una dimensión más elevada. Y recuerda: reproducción no es creación.

Cuando la mujer esté liberada de la carga innecesaria de la reproducción, podrá crear con más fuerza que ningún hombre, porque si puede dar a luz a un niño, ¿por qué no va a poder dar a luz música hermosa? Pero no ha sido posible hasta ahora, y el hombre ha estado tratando de racionalizar...

Cuando las energías de la mujer se liberen, podrá ser creativa. Pero creo que el hombre tiene miedo de la creatividad de la mujer. Ella puede superar ciertamente la creatividad del hombre; ella está naturalmente más dotada de creatividad.

Estoy totalmente a favor de la creatividad, pero recuerda, reproducción no es creatividad; no son sinónimos. La creatividad es algo consciente, la reproducción es inconsciente. La creatividad es meditativa, la reproducción no tiene absolutamente nada que ver con la meditación.

Pero el hombre ha estado utilizando a la mujer casi como al ganado. Ha estado utilizando a la mujer para criar a. sus niños; ha estado utilizando a la mujer como si fuera una granja. Ese es exactamente el significado de la palabra marido: marido significa el granjero. Agricultura significa maridaje3: la esposa es el campo y el marido el granjero, y la única función de la esposa es dar una buena cosecha cada año.

La mujer nunca puede liberarse a no ser que se comprenda esto: que tiene que abandonar esta pauta del pasado. Y el hombre le ha estado diciendo: ¡Eres magnífica porque das a luz a los niños! Esto es una racionalización, esto es una consolación. Cuidado con esos trucos. El hombre ha explotado a la mujer de todas las maneras posibles, y ya es hora de acabar con esta explotación.