Quelacion sanadora de la energía

La sanadora Barbara Brennan nos guía paso a paso como aplicar la quelación de la energía y del aura a través de las manos y el equilibrio de los chakras.

BARBARA ANN BRENNAN

EL DON DE SANAR

El don de sanar reside en cada uno

No es un don que se concede solo a unos pocos. Es una cualidad innata suya y mía. Todo el mundo puede beneficiarse de la sanación, y todo el mundo puede aprender a sanar. Cada cual puede sanarse a sí mismo y a los demás.

Usted se proporciona sanación, aun cuando no quiera llamarla así. ¿Qué es lo primero que hace cuando se ocasiona una herida? Generalmente, toca la parte herida de su cuerpo. Puede incluso sujetarla para tratar de mitigar el dolor. Este instinto físico envía también energía sanadora a la parte afectada. Si se relaja y coloca sus manos sobre la herida más tiempo de lo que haría normalmente, comprobará cómo tiene efecto una sanación aún más intensa.

Todas las madres tocan, abrazan, besan o acarician a sus hijos cuando éstos contraen algún dolor, y hacen lo mismo con el resto de sus seres queridos. Si usted observa estas sencillas reacciones y procede a estudiarlas, constatará que cuando usted toca a alguien a quien quiere mucho, se produce un efecto más intenso que si toca a un desconocido. Lo más probable es que haya conferido a su tacto una esencia especial: la esencia del amor que siente hacia esa persona. Como ve, usted ha sido siempre capaz de sanar, pero no tenía conciencia de ello.

Cuando usted está alegre, feliz, lleno de energía, o en cualquier otra disposición positiva, su tacto será más agradable para los demás que si estuviera de mal humor. La energía que encierra un contacto malhumorado no es la misma que existe en un contacto alegre. Su estado de ánimo en un momento dado se expresa a través de su energía. Cuando aprenda a regular su estado de ánimo y, en consecuencia, la naturaleza de su energía y su flujo energético, pronto utilizará su energía para sanar. Esto es lo que hacen los sanadores. Simplemente, aprenden a percibir y regular su energía para utilizarla en la sanación.

Estas experiencias personales cotidianas, que tengo la certeza se han desarrollado desde que habitábamos en cavernas, han dado origen a la base de la sanación por imposición de las manos. Ha tenido lugar desde que ha existido el ser humano. Los antiguos ya eran conscientes del poder sanador que residía en sus manos. Cada cultura investigaba y utilizaba este poder desde la estructura de sus conocimientos y tradiciones. En su libro El futuro de la ciencia, John White enumera noventa y siete culturas distintas de la faz de la Tierra, cada una de las cuales posee su propia denominación para referirse a la sanación o a los campos de energía vital. Éstos se conocen en China y la India desde hace más de cinco mil años.

Yo llamo la energía vital que rodea y penetra en todo campo de energía universal. Y llamo la energía vital asociada a los seres humanos campo energético humano. Se conoce más comúnmente como aura humana.

EL PODER DEL TACTO

El tacto tiene poder del canal de sanación. Tocar a alguien con afecto y respeto es suficiente para abrir posibilidades de sanación, al menos consuelo y alivio.

Las manos son extensiones energéticas de los impulsos cardíacos. Donde nuestra mano toca, nuestros corazones se tocan. No es de extrañar que cuando una persona tiene un ataque al corazón siente un fuerte dolor bajando por su brazo izquierdo...

Independientemente del nombre dado, los procesos de canalización de energía, mediante la imposición de manos, suelen ser procesos beneficiosos, que constituyen buenas experiencias.

Reiki, pases magnéticos, quelao y tantos otros, están en esa línea.

EL QUELAO

Quelao: Carga y limpieza del aura de la persona.

Quelación: Cargar y despejar el aura del paciente.

El término quelar, derivado de la voz griega chele, o garra, significa arañar.

La reverenda Rosalyn Bruyere, fundadora de esta técnica desarrollada por ella misma, adoptó dicho término para indicar, sencillamente, la limpieza del campo del paciente mediante la separación de los residuos aurales. La quelación, además, llena el aura de energía, como si se hinchara un globo, y por lo general la equilibra.

Esto se logra haciendo correr la energía por el cuerpo de manera gradual, empezando por los pies la energía atraviesa el cuerpo en sentido ascendente desde los pies, ya que normalmente se obtiene a partir de la tierra por medio del primer chakra y de los dos chakras de las plantas de los pies. Estas energías terrestres son necesarias en todo momento para sanar el cuerpo físico, puesto que son las que presentan las vibraciones físicas más bajas. De este modo es posible verter energía con absoluta naturalidad al agotado sistema. El cuerpo energético la absorbe y la transporta a donde sea necesaria.

LA QUELACIÓN DEL AURA

Pasos para la realización de la quelación del aura

CANALIZACIÓN INICIAL

Este primer paso empieza en los pies

Siéntese y apoye las manos en los pies del paciente hasta que se despeje y equilibre su campo general, que será activado en su totalidad por la energía que fluye desde esta posición.

No intente controlar la intensidad de la energía que está canalizando; deje que fluya de forma automática. Si trata de controlar la energía canalizada, probablemente interferirá en vez de ayudar, ya que los campos disponen de mayores opciones que su mente lineal.

Conforme la energía fluye, despeja, carga y, en general, reequilibra el campo energético del paciente, probablemente la sentirá usted discurrir por sus manos. Es como si manaran chorros desde ellas. Es posible que note una sensación de calor u hormigueo. Su pulso se hará quizá lento y rítmico. Si es usted sensible en este aspecto, detectará los cambios que se producen en el flujo.

Después de unos minutos de trabajo, la intensidad del flujo remitirá y se producirá un flujo igual de energía ascendente por ambos costados del cuerpo. Ello quiere decir que el campo está equilibrado en conjunto y que usted está listo para pasar a la siguiente posición.

QUELACIÓN TOBILLO IZQUIERDO

Pase a continuación al tobillo izquierdo del paciente

Apoyando en todo momento una mano en el cuerpo de éste para mantener la conexión, toque con la mano derecha la planta del pie izquierdo del paciente y con la mano izquierda su tobillo izquierdo.

Deje fluir la energía desde su mano izquierda a la derecha atravesando el pie del paciente.

Puede que, al principio, la energía sea débil; luego, a medida que los ríos de energía se vayan llenando, el flujo se hará más fuerte. Cuando el pie se llene de energía, el flujo entre sus manos descenderá.

QUELACIÓN TOBILLO DERECHO

Pase a continuación al tobillo derecho del paciente

Cambie ahora las manos al pie y al tobillo derechos y repita la operación. LLlénelo de energía, como hizo con el pie izquierdo. Recuerde mantener la conexión.

QUELACIÓN RODILLA IZQUIERDA

Pase a continuación a la rodilla izquierda del paciente

Pase ahora la mano derecha al tobillo izquierdo del paciente y la izquierda a la rodilla izquierda. Haga que la energía de su mano derecha pase por la parte inferior de la pierna izquierda del paciente para llegar a la mano izquierda de usted.

QUELACIÓN RODILLA DERECHA

Pase a continuación a la rodilla derecha del paciente

Pase ahora la mano izquierda al tobillo derecho del paciente y la derecha a la rodilla derecha. Haga que la energía de su mano izquierda pase por la parte inferior de la pierna derecha del paciente para llegar a la mano derecha de usted.

QUELACIÓN CADERAS

Pase a continuación a las caderas del paciente

Siga trabajando por las piernas, subiendo de articulación en articulación, desde la rodilla a la cadera y desde el lado, izquierdo al derecho. A medida que progrese su trabajo con el cuerpo se seguirá despejando el aura del paciente y éste entrará en un estado alterado de conciencia.

QUELACIÓN SEGUNDO CHAKRA

Pase a continuación al segundo chacra del paciente

Pase de la cadera al segundo chakra. En esta posición su mano derecha se apoya en la cadera del paciente, y la izquierda, en el centro del segundo chakra por encima del hueso púbico.

Repita la operación en cada costado. Tendrá conciencia de los cambios que van despejando el aura como consecuencia de la elevación y el descenso del flujo energético mientras pasa de un lugar al siguiente.

QUELACIÓN TERCER CHAKRA

Pase a continuación al tercer chacra del paciente

Después de haber despejado, cargado y equilibrado el segundo chakra, desplace la mano derecha al segundo chakra y la izquierda al tercero.

Una vez que haya despejado usted esta área, ponga la mano derecha en el tercer chakra y la izquierda en el cuarto.

A estas alturas de la sanación, usted empezará a abrir material emocional conforme se desplace hacia los chakras. Tan pronto como se empiece a liberar el material emocional, el sujeto intentará contener la respiración esforzándose por mantener ocultos sus sentimientos; Indúzcale a que respire y exteriorice sus sentimientos, que no los reprima.

Como resultado de la expresión de sus sentimientos los chakras segundo y tercero del receptor de la terapia se abren y se despejara aún más. Siga enviando energía.

QUELACIÓN CUARTO Y QUINTO CHAKRA

Pase a continuación al cuarto y quinto chacra del paciente

Para quelar los chakras cuatro y cinco limítese a ascender por el cuerpo, poniendo la mano izquierda en el chakra superior y la derecha en el inferior.

Al llegar al quinto chakra, la mayoría de los pacientes se sentirán más cómodos si les coloca la mano izquierda debajo del cuello en lugar de encima.

En este paso debe equilibrar las energías del paciente

Cuando haya concluido esta operación, lleve cada mano a un hombro mientras se desliza para quedar sentado por encima de la cabeza de su paciente y equilibre los lados derecho e izquierdo de su campo energético.

Luego vaya avanzando las manos lentamente por los lados del cuello hasta las sienes, haciendo circular la energía mientras realiza el movimiento.

QUELACIÓN SEXTO CHAKRA

Pase a continuación al sexto chacra del paciente

Para sanar en la sexta capa del campo aural tiene que trabajar principalmente a través de los chakras de su corazón, el tercer ojo y la corona.

Ponga las manos en forma de taza sobre el tercer ojo del paciente con los dedos juntos, menos los pulgares, que deberá cruzar; eleve sus vibraciones para alcanzar la luz y deje entonces que fluya por y frente a usted para penetrar en el centro del área cerebral de su paciente.

Alcance físicamente la realidad espiritual más elevada que conozca conectando primero a través del corazón con el amor universal y elevándose luego con esa conciencia para llegar a la luz.

Esta sanación debe ir acompañada por un profundo amor hacia cada partícula del ser de su paciente.

Estar conectado con la conciencia mesiánica o el amor universal implica mantener a alguien en el corazón y penetrar en un estado de aceptación total y de voluntad positiva hacia el bienestar y la existencia continuada de dicha persona. Es una celebración de su existencia en el amor. Esto significa que debe penetrar en este estado del ser, no imaginarlo simplemente. Manteniéndose en dicho estado, trate de alcanzar la luz y la realidad espiritual más elevada y amplia que pueda experimentar.

Esta forma de canalizar es muy fuerte, por lo que debe sacudir ligeramente las manos para romper la conexión con el sexto chakra antes de proceder al paso siguiente del proceso de sanación.

QUELACIÓN SÉPTIMO CHAKRA

Pase a continuación séptimo chacra del paciente

Para completar la sanación en el séptimo nivel del aura, inclínese sobre la cabeza del paciente y una las manos, que se encuentran a unos 75 centímetros por encima de la cabeza, en la coraza ovoide del aura.

Entonces describa un amplio movimiento de barrido alrededor de todo el cuerpo del paciente. Desplace la mano izquierda en esa dirección, y la derecha por la derecha del cuerpo.

La energía fluye de sus manos formando un arco desde la zona superior de la cabeza hasta por debajo de los pies del enfermo, mejorando el séptimo nivel del aura en su totalidad.

Complete el círculo de manera que trace una forma ovoide completa alrededor del paciente.

Una vez terminada esta operación, rompa la conexión entre su campo y el del paciente con una suave agitación brusca de las manos, y se desplaza entonces al lado derecho del paciente.

Por lo general, el paciente necesita descansar un rato después de la sesión de sanación, y probablemente estará mareado durante algún tiempo. Tras un breve descanso, pida al paciente que se siente al borde de la mesa unos minutos, antes de levantarse, de lo contrario se podría marear.

Ofrezca al paciente un vaso lleno de agua (si es posible mineral), y bébase usted otro.

NOTA IMPORTANTE

Para los enfermos cardiacos es importante invertir la quelación, es decir, extraer la energía del chakra del corazón, ya que, por lo general, se muestra obturado por energía oscura.

INSTRUCCIONES ADICIONALES

Algunas instrucciones adicionales sobre la quelación

A - Recuerde que está canalizando, no irradiando.

Así pues, usted eleva sus vibraciones hasta el nivel de energía necesario y, a renglón seguido, se limita a entrar en contacto con el campo energético universal y dejarlo fluir. Si no sana de esta manera, se cansará con mucha rapidez. No puede irradiar o dirigir energía suficiente para sanar desde el interior de su propio campo; tiene que canalizarla (su misión al canalizar es únicamente elevar el nivel de las vibraciones de manera que pueda completar el circuito con el Centro Energético Universal).

B - Recuerde mantener despejada su mente.

Durante la Quelación es muy importante que Usted mantenga despejada su mente, especialmente si se mantiene centrado y enfocado y su respiración es adecuada. La mejor forma de respirar que se recomienda es inspirando y espirando larga y continuadamente, con muy poca pausa intermedia. La respiración debe realizarse por la nariz, frotando el aire contra el paladar blando.

C - Recuerde hacer vibrar su cuerpo.

Mantenga con firmeza las manos, ligeramente tensadas, sobre el cuerpo del paciente y dirija a éste, a través de ellas, toda la energía que está recibiendo con todos sus chakras. Es posible que desee hacer vibrar su cuerpo para que sus chakras bombeen más energía.

D - Recuerde la conexión a tierra.

En esta parte de la sanación es probable que utilice más energía a través de los chakras inferiores que por los superiores. Una gran cantidad de energía asciende también desde la Tierra a través de las plantas de los pies. Asegúrese de que los tiene bien afirmados sobre el suelo (si es posible descalzo). Visualice las raíces que crecen hacia el centro de la Tierra y la energía que se extrae a través de ellas. Este proceso nutre y carga los cuerpos energéticos inferiores. Asegúrese de que su cuerpo se encuentra en una postura cómoda para garantizar el libre flujo de la energía. El sistema energético del paciente absorberá la energía y se desplazará automáticamente a la parte del cuerpo donde sea necesaria.

E - Recuerde relajar los primeros niveles.

Tan pronto como el sanador realiza la imposición de manos sobre el paciente, se establece entre ambos una mayor confianza mutua.

Durante la quelación de las áreas de los chakras segundo, tercero y cuarto, la liberación emocional del Receptor de la Terapia la ha transportado a un estado de profunda relajación. Los primeros cuatro niveles de su campo están lo bastante despejados como para soportar el trabajo en las capas quinta y séptima.

Llegar a ser sanador significa avanzar hacia este poder creativo universal que experimentamos como amor al reidentificar el yo con el universo total.

Barbara Ann Brennan