La iluminación espiritual

La honradez de los hipócritas

POR: JEBUNA

Imagen; La honradez de los hipócritas; Jebuna

Las leyes del amor hacen esta exigencia

El que se crea honrado, honesto, decente, decoroso y que diga a los cuatro vientos: Mis Padres me enseñaron a ser honesto ante todo prepárese, a lo mejor sus creencias programadas se pueden derrumbar con este artículo. Aclaro, esto no es cosa mía, la naturaleza y las leyes del amor hacen esta exigencia, yo simplemente me limito a trascribir una verdad que salta a la vista.

Tú tienes, él tiene, nosotros tenemos, ellos tienen… es un derecho, a cada quien se le da lo que merece, Dios da pan al que no tiene dientes, de sobra, también sabemos que respetar lo ajeno es de vital importancia para una sociedad en paz, en el recibir o en el quitar, está la esencia de la honradez, incluso, hay un Dharma y un Karma, también, existe un mandamiento: No robaras… Señores, la ley de causa y el efecto es el maestro que se encargara de que entendamos este cuento.

Si la ley de causa y efecto actuara al instante, a lo mejor corregiríamos al solo toque de algo que altere la naturaleza, pero no, la ley se toma su tiempo, afinar nuestro espíritu a la tonalidad sagrada requiere de un proceso que pueda asimilar nuestro ser, por eso, en estos mundos relativos existen los malitos, malos y malotes… buenitos, buenos y buenotes. Recalco, acá no hay santos ni demonios, esa facultad solo la da quien es perfecto (DIOS), solo la imperfección humana eleva o degrada erradamente a esta condición.

Hermanos, quien cree en Dios Todo y Eterno y lo respeta, bien se les podría preguntar: ¿Usted le robaría a Papa Dios? ¿Usted es honrado con Papa Dios? Y acá empieza la realidad del asunto, Dios da, todo su haber es sagrado, complace plenamente a cada ser, pero ante todo, su mayor regalo es la vida, sé que por ahí andan unos pocos despreciando esta preciosa dádiva, pero en su mayoría diríamos: Dios me da la vida, el me la quita, pero seamos honrados, hasta nuestros malos hábitos atentan contra la bondad de la vida, en mi caso lejos que estoy de la maestría, solo me lavo las manos diciendo que lo que hago en este instante es trascribir la verdad sobre la honradez.

En esta que sigue… agudizo lo más que puedo, porque si mi vida es sagrada, lo es mucho más la ajena, como decía a un amigo en estos días: Uno no puede ser feliz a costa de la infelicidad de los demás robarle o quitarle la vida a otro ser no creo que sea muy honesto, tal vez se creen muy decentes porque no roban objetos, pero si son capaces de quitarle la vida a un animalito para satisfacer sus deseos. Sé que algunos justifican esta falta de honradez con un libro y tal vez otro tanto justifique la muerte de un humano con este mismo librito, acá doy gracias a Dios por no seguir libros, de entender que su único libro es el que debemos de seguir, El libro sagrado de la naturaleza el único que se puede leer en el aquí y en el ahora.

Para los que están llegando apenas a nuestra web les voy a trascribir la voz de Dios sobre la compasión que se manifiesta a través de la naturaleza, señores, entiendan el poder que tiene nuestro creador de comunicarse con nuestro ser, este, sobrepasa cualquier escrito realizado por los humanos y dice: Cuando matan a un animal veo el sufrimiento que hay en ese ser, ese sufrimiento es el que me habla, es el que me enseña a respetarlo, no porque me lo dijo un católico o un cristiano y mucho menos un libro, tampoco me lo tiene que decir un Maestro, me lo dice el sentido común otorgado por Dios o acaso Dios nos dio los sentidos de adorno, pienso que hay que usar los sentidos para que estos activen nuestra consciencia.

Si los parámetros de la honradez están determinados por un libro, estamos en la olla, nos llevo el putas, un libro no puede decirnos como ser honestos, como ser felices, como ser buenos… solamente la voz de Dios en tu consciencia te dice que es bueno y que es malo, claro que si tú NO tienes consciencia, no queda más remedio que un libro sea tu consciencia, pero si leíste este articulo y tu consciencia es un librito, perdiste el tiempo, porque no podrás entenderlo, tu mente está cerrada, no hay espacio para que asimiles, para nada nuevo, ya estas programado, eres esclavo de ese librito, tu honradez la califican unas letras muertas.

Seamos honestos, busquemos a Dios Todo y Eterno en el aquí y en el ahora.

Nota final: Quieren crucifixiones, quien no busca a Dios en el aquí y en el ahora está crucificando a diario su existencia, está desconociendo su presencia, está menospreciando su manifestación, canjea por unas cuantas letras muertas la vida de nuestro Padre, señores, sientan la voz de Dios en el aquí y él ahora, es letra viva, empiecen desde ahora a interpretarla, no se dejen engatusar más, desconectasen de lo irreal y conéctense la realidad.

Sé que todos pensamos distinto, pero lo obvio es que a todos nos de la suma de 2+2 = 4, si obtenemos otro resultado debe haber algo raro, por favor, no confundir con los gustos, ahí si tenemos derecho a ser distintos, En cuestión de gustos no hay disgustos obviamente sin violar las leyes del amor, señores, hagan la siguiente operación para que vea que a todos los conscientes nos da el mismo resultado, matar a un animalito = a sufrimiento, pero estoy absolutamente seguro y lo repito, absolutamente seguro, al inconsciente solo de da como resultado, placer, los insensibles que se ocultan bajo el pretexto que todos somos distintos no justifica actos de inconsciencia, en el reino del amor no podemos permitir a los que destruyen el regalo sagrado de Dios Todo y Eterno, La Vida, a estos seres hay que explicarles lo delicado que es producir sufrimiento y dolor.


RELACIONADOS

«La honradez de los hipócritas»