Viva la muerte
Pocos saben qué es la vida. Viven, pero viven en tal ignorancia que nunca encuentran su propia vida. La religión hizo que la muerte sea algo doloroso.
JEBUNA
Mentes apegadas
Decir: viva la muerte, es un profundo entendimiento de la existencia, es la expresión natural de quien ha concluido que vivir la vida es tan importante como vivir la muerte. Solo los muertos en vida no pueden ver este maravilloso suceso como es realmente. Ellos no quieren despertar, siguen aferrados de forma obsesiva al hecho que un ser querido muera. Ninguna fecha, edad o circunstancia es satisfactoria para que suceda. Aunque muera de 150 años con coros angelicales también lo lamentaran. Es lo normal para una mente apegada.
El insensato, está destinado a sufrir por causa de la muerte. En su mente existe un infierno y un cielo y en su subconsciente ronda la pregunta tras la muerte: ¿Dónde se ira? Como hay duda, existe una alegría del 50%, un dolor del 50%. No toques sensibilidades porque seguramente te hablaran desde el dolor y te ganaras una retahíla. En el otro caso, si es quien habla desde la alegría, al dolorido, le molestara saber que hay alguien comprenda la realidad de la muerte.
Pocos saben qué es la vida. Viven, pero viven en tal ignorancia que nunca encuentran su propia vida. La religión se ha encargo de que la muerte sea algo desagradable y doloroso. Si tienes miedo a la muerte nada raro que reces con ojos blanqueados y eso es precisamente lo que necesitan los predicadores de pacotilla, seres con dolor para que ellos puedan vender su consuelo.
El moribundo es el único que puede entender la muerte como realmente es. Es lo más íntimo que alguien logra hacer en su existencia. Además, es una experiencia que no se puede compartir. Entonces, ¿Por qué no dejar que simplemente suceda? Si en tu ser hay alegría, una muerte no te puede perturbar. Deja que suceda, se un observador feliz. Simplemente hay un cadáver acostado ahí en vez de un cuerpo vivo. Por eso algunos decimos: viva la muerte.
El ego está en contra de las dos, la vida y la muerte.
El ego tiene miedo de vivir y el ego tiene miedo de morir.