Frases de Juzgar

Imagen de la frase: Sé compasivo, sé inteligente y amoroso. Mira a los demás sin juzgarlos. No empieces a sentirte recto. No te conviertas en «Su santidad». Nunca.

Frases sobre «Juzgar»

Nunca podemos juzgar la vida de los demás, porque cada uno sabe de su propio dolor y de su propia renuncia. Una cosa es suponer que uno esta en el camino cierto; otra es suponer que ese camino es el único.

Debido a que yo soy yo, me resulta muy difícil juzgar que tan fascinante podría ser escuchar durante dos horas mi tono nasal y con acento tan marcado para alguien que no fuese yo.

Evite los pulpitos, plataformas, escenarios y pedestales. Mantente al suelo duro. Es la única forma en que puedes juzgar tu estatus aproximado como hombre.

La Sabiduría nos hace juzgar todas las cosas, según la mas alta de todas las Causas, de la cual todas las demás dependen sin que ella dependa de ninguna otra.

Si escuchamos, dejamos de juzgar, y creamos un espacio de silencio que nos permite responder desde la consciencia.

Sanaras si tienes una perdida del interés en juzgarse a si mismo.

Sabía usted que juzgar a una persona no define quién es él, sino quien tú eres.

Hoy no juzgare nada de lo que me ocurra.

El dialogo fluye cuando se escucha con aceptación, sin juzgar lo que se dice.

Cuando eres impecable, asumes la responsabilidad de tus actos, pero sin juzgarte ni culparte.

No juzguéis a los demás si no queréis ser juzgados. Porque con el mismo juicio que juzgareis habéis de ser juzgados, y con la misma medida que midiereis, seréis medidos vosotros.

El alma tiende siempre a juzgar a los otros por lo que piensa de si misma.

Se menos un juez y te sorprenderás que cuando te conviertes en un testigo y no te juzgas a ti mismo, dejas también de juzgar a otros. Y eso te hace mas humano, mas compasivo, mas comprensivo.

Atestigua sin juzgar.

El Campeón Mundial es la mejor personificación de su época y en base a el podemos juzgar el desarrollo del Ajedrez.

Él no mide con nuestro metro. Dios es bueno y nosotros más o menos malos y si Dios juzgara como nosotros juzgamos, entonces muy pocos se salvarían.

El mayor catalizador del cambio en las relaciones es la aceptación total de tu pareja tal como es, dejando completamente de juzgarla y de intentar cambiarla.

No concibas a Dios como una mera palabra, ni como un extraño, ni como alguien que mora en las alturas a la espera de juzgarte y castigarte.

Cada uno tendrá que juzgar según lo que entiende por pobreza y por riqueza y a qué aspira en está vida. Habrá quien teniendo mucho no lo tiene todo.

Medite desde el banco de la conciencia y observe la actividad de los pensamientos. No trate de detener, cambiar o juzgar esta experiencia.