Cualesquiera que sean las propias visiones del tercer ojo, no deben convertirse en una prisión. Siempre debe dejarse espacio para cambiar la propia mente y sistema de ver el mundo.
Con el tercer ojo funcionando, si miras a una persona miras su alma, su espíritu, no su cuerpo; de igual manera que con los ojos físicos miras el cuerpo físico, pero no puedes ver el alma.
SAMUEL SAGAN
CONSEJOS PARA ABRIR EL TERCER OJO