Elige ser bien y dile no al fracaso con el poder de superación de la confianza en ti mismo y de las puertas que abre la paciencia eso atrae y eso le llega.
El sendero de la Espiritualidad y del Amor es para encontrarle el sentido a la vida, es para ir mucho más allá y encontrar la devoción de servir a los demás.
Busca los tres tesoros de la espiritualidad: La consciencia, el amor y la paz interior. Libérate de las barreras que te impiden ser espiritual y amar.
No es fácil reconocer que cuando crees tener la razón tu ego soberbio te hace sentir superior. De allí a una ruptura dolorosa no hay más que un paso.
El espíritu de la Navidad es ir a la esencia de la vida con estos claros pasos. Sana, agradece, dar sin recibir, paz interior y sintonía con el amor.
Tu mente no aprende nada, porque se cree llena. Cuando la humildad haga un vacío en su ego podrá recibir y dar más, donde hay vacío hay posibilidades.
La pregunta es a cuántos hijos y padres los seduce solo el éxito económico, y cuántos logran ver en los deportes una estupenda escuela de los valores.
Cambia animoso antes que la vida te mueva a cambiar con dolor. El conocimiento llega a través de los sentidos y por eso te conviene aprovecharlos.
Ecuación sagrada es saber dar y saber recibir, ser un buen dador y también un buen receptor. Es el sendero correcto es el de la humildad, y el amor.
La aceptación serena, amorosa y activa libra de batallas estériles con Dios, contigo mismo, con los demás y la vida. La aceptación que ilumina todo.