Evolución y transformación de la consciencia

Deepak Chopra nos dice que la evolución y transformación de la consciencia es una inclinación natural que siempre ha sido parte de tu interior espiritual.

DEEPAK CHOPRA

EVOLUCIÓN DE LA CONSCIENCIA

La evolución de la consciencia con las vibraciones adecuas

Los religiosos creen que Dios creó el mundo entero en seis días. Evidentemente, cuando Dios crea algo, tiene que ser entero y perfecto; por consiguiente, no se plantea la cuestión de la evolución. La evolución significa que las cosas evolucionan, mejoran, se perfeccionan, alcanzan niveles superiores.

La evolución radica en la consciencia, no en el cuerpo.

La evolución no tiene que producirse en el cuerpo, sino en la consciencia, y entonces así puede haber una transformación y progreso espiritual, en una evolución espiritual, que ha constituido la base de todos los misticismos del mundo.

El hombre nace como una semilla.

Aceptar la semilla como tu vida es el mayor error que se puede cometer. Millones de personas nacen como semillas, frescas, jóvenes, con un tremendo potencial para crecer, pero como aceptan la semilla como si fuera la vida, mueren como semillas muertas; en su vida no ocurre nada, no hay ninguna transformación.

Si el hombre se ocupa de la semilla con la que ha nacido, le proporciona la tierra adecuada, la atmósfera adecuada y las vibraciones adecuas, avanza por el buen camino, en el que la semilla puede empezar a crecer, y la floración última adquiere su máxima expresión, cuando tu ser florece, abre todos sus pétalos y extiende su maravillosa fragancia.

A menos que florezcas hasta alcanzar el estado espiritual en su máxima expresión, tu vida no será sino un ejercicio inútil. Naciste innecesariamente, vives innecesariamente y morirás innecesariamente. Tu biografía entera puede reducirse a una sola palabra: innecesaria, sin transformación alguna.

Deepak Chopra enseña sobre la evolución...

EL SECRETO DE LA EVOLUCIÓN

El secreto de la evolución de la consciencia

Solo tú puedes explorar tu mundo interior. De todas las formas que existen para desarrollar tu potencial interior, la más poderosa es sin duda el flujo de la evolución.

La evolución no es nada más una teoría, sino también una fuerza que ha estado trabajando en cada célula de tu cuerpo desde el día en que naciste. En la infancia, experimentaste la evolución como un proceso de crecimiento que no hacía falta elegir: tu cuerpo estaba programado para evolucionar desde que eras un bebé.

Tal vez hasta este momento tus principales ejes en la vida han sido ganarte la vida, tener una familia y explorar el mundo allá afuera. Sin embargo, ahora puedes adiestrarte en construir el yo que realmente quieres al elegir evolucionar. La fuerza de la evolución trabaja en tu beneficio si puedes hacer lo que hacías de niño sin ningún esfuerzo.

Sin embargo, en la edad adulta, la evolución es una elección. La clave es sencilla. Sólo tienes que hacer una cosa para alinearte con la fuerza de la evolución: participa en tu propia consciencia. Pon atención a estar alerta y consciente. Mientras lo haces, desarrollarás nuevas habilidades que repercutirán en cada elección que hagas en la vida. La elección más evolucionada es la que tiene un mayor beneficio para tu cuerpo, mente y espíritu. No puedes decidir cómo hacer esas elecciones ideales usando nada más tu intelecto.

Sólo la consciencia sabe lo que es bueno para la consciencia.

El primer paso para tener una transformación es ir hacia el interior y que ello se convierta en parte de tu rutina cotidiana. La mayoría de las personas pasan apenas un minuto en el silencio profundo y la paz que existe en su interior; se trata de un territorio desconocido. No obstante, las tradiciones de sabiduría del mundo descubrieron que la consciencia posee una ventaja secreta y oculta.

La consciencia quiere evolucionar; esta inclinación natural siempre ha sido parte de ti.

En tu consciencia, encontrarás lo siguiente:

  • La mente siempre prefiere avanzar.
  • La mente no quiere quedarse inmóvil.
  • A tu mente no le gusta estar estática.
  • Al comenzar, la evolución acelera su ritmo.
  • La consciencia se expande naturalmente.
  • El deseo se alimenta de querer más.
  • Mientras te conozcas, mejor será tu vida.
  • Las intenciones positivas reciben apoyo.
  • Las intenciones negativas no reciben apoyo.

La consciencia individual está conectada a una consciencia superior, que percibimos como una sensación de pertenencia a un propósito superior. Cuando la evolución se convierte en tu principal meta, puedes cuestionarte todos los días para ver si estás avanzando.

Si la evolución es tu principal meta pregúntate:

  • ¿Cómo puedo avanzar hoy?
  • ¿Mi crecimiento personal se acelera?
  • ¿Me conozco mejor y disfruto más mi vida?
  • ¿Soy más positivo si dejo de juzgarme?
  • ¿Estoy conectado con una visión superior?
  • ¿Estoy conectado con un poder superior?

Estas son cuestiones prácticas que marcan el trayecto espiritual. A mí me sirven para medir mi propia evolución día tras día. Avanzo si siento más compasión, menos culpa y mayor calma. Mi crecimiento personal se acelera cuando logro mucho antes una meta que pensé que me llevaría años, como dejar ir la necesidad de sentir enojo. Creo firmemente en andar con los pies lo más afincados en la tierra que puedo.

Ha habido momentos en los que, mientras me encuentro en el tren rápido de Nueva York a Boston y observo el paisaje gris que pasa zumbando ante mis ojos, me fundo en él, sintiendo como si Deepak se hubiese esfumado y solo quedara el Ser, la paz de la existencia pura. Estos momentos privilegiados de transformación son el tipo de indicadores de los que hablo. Me muestran que la evolución es una fuerza real en mi interior, una fuerza universal e individual al mismo tiempo. No puedo imaginar mayor regalo.

NO CIERRES PUERTAS

No cierres las puertas a tu consciencia.

SER PURO

Si se cierra, vivimos en la separación.

Hay un temor subyacente a la muerte, pérdida de conexión y ausencia de cualquier presencia divina.

DICHA POTENCIAL

Si se cierra, la vida carece de alegría.

La felicidad es solo un estado efímero. No hay apertura para las experiencias sublimes.

EL AMOR

Si se cierra, la vida es cruel.

Nos sentimos aislados en un mundo gris donde las demás personas son figuras distantes, indiferentes. No se percibe la presencia de una mano amorosa en la creación.

LA COGNICIÓN

Si se cierra, las leyes desconciertan.

Las leyes de la naturaleza resultan desconcertantes. El conocimiento se alcanza solo mediante los hechos y la limitada experiencia personal, sin acceso al significado profundo.

MITOS Y ARQUETIPOS

Si se cierra, no existen modelos.

No existen héroes, dioses ni búsquedas apasionadas. No encontramos un significado mítico en nuestras vidas. No hay una dimensión más profunda en la relación entre hombres y mujeres.

LA INTUICIÓN

Si se cierra, la vida pierde sutileza.

La persona no alcanza a comprender a fondo las cosas, no tiene chispazos de genialidad ni esos momentos de júbilo en los que decimos: ¡Aja!. La red de conexiones sutiles que sostiene al universo queda totalmente oculta.

LA IMAGINACIÓN

Si se cierra, la vida queda sin fantasía.

Vemos todo de manera literal; el arte y las metáforas importan poco. Las decisiones importantes se abordan mediante el análisis técnico, y no hay esperanza de un salto creativo súbito.

LA RAZÓN

Si se cierra, la vida no tiene sentido.

Somos gobernados por impulsos aleatorios. Ninguna línea de acción se continúa hasta su conclusión, y las decisiones se toman irracionalmente.

LA EMOCIÓN

Si se cierra, no hay los sentimientos.

Hay poco o ningún espacio para la compasión y la empatía. Los sucesos parecen desconectados, sin continuidad, y las demás personas no ofrecen oportunidad alguna de establecer lazos.

EL CUERPO FÍSICO

Si se cierra, la vida se vuelve mental.

La persona siente que su cuerpo está inerte, que es un peso muerto que debe arrastrar. El cuerpo existe como un sistema de apoyo necesario para la vida, nada más. No hay combustible para moverse y actuar en el mundo.

La elección más evolucionada es la de mayor beneficio pero no puedes decidirlo usando nada más que tu intelecto. Sólo la consciencia sabe lo que es bueno para la consciencia.

Deepak Chopra