La iluminación espiritual

Sabiduría del primer iluminado del Tíbet

POR: MILAREPA

Imagen; Sabiduría del primer iluminado del Tíbet; Milarepa

MILAREPA EL YOGI DEL TÍBET

Pocos deseos y satisfacerse con lo simple es de un hombre superior.

En la vida de Milarepa se demuestra que el sendero yóguico hacia la Supramundanalidad trasciende las fórmulas intelectualmente modeladas pertenecientes a la salvación, y está siempre expedito para todo el género humano, sin tener en cuenta su filiación religiosa.

Según el enfoque de Milarepa, ninguno de los métodos mundanos de desarrollo intelectual es esencial para lograr la Sabiduría; para él, el Conocimiento Correcto no había de ganarse mediante estudios librescos ni profesiones de fe.

Milarepa de esto dio testimonio de la manera siguiente:

Acostumbrado a meditar en las Verdades Escogidas Susurradas,
olvidé todo lo dicho en escritos y libros impresos.

Acostumbrado a aplicar cada nueva experiencia a mi desarrollo espiritual,
olvidé todos los credos y dogmas.

Acostumbrado a conocer el significado de lo Inefable,
olvidé el camino que sigue las raíces de los verbos, y el origen de palabras y de frases.

Veamos en este buen resumen como El Gran Yogi Milarepa expreso su sabiduría...

PRECEPTO DE MARPA A MILAREPA

Juzgando la cara del hombre sabe uno si ha comido o no.

No veas las palabras ve su significado no trates de inquirir todos los fenómenos mira tu mente. Las filosofías son hechuras de la mente y las palabras especulativas poco significan, ya que no tienen utilidad alguna para dominar las pasiones. Mis libros son todo lo que aparece y existe.

Nunca he estudiado lo que está escrito en tinta sobre papel.

No necesito leer libros, todo lo que aparece en mi mente contiene un mensaje de Dharma. Todas mis experiencias confirman la verdad de las enseñanzas de Buda y aumentan mis realizaciones espirituales. Mi espiritualidad consiste en no engañarme a mí mismo y en no dañar a los demás.

Así como solo el poder del sol disipa la bruma y nada más, el poder del conocimiento despeja los prejuicios. No hay otro modo de disiparlos. Reconócelos como sueños infundados. Reconócelos como burbujas efímeras. Reconócelos como arcoíris sin sustancia. Reconócelos como espacio indivisible.

Quien puede ver sin distracción su propia mente no necesita pláticas ni palabrerías; quien puede absorberse en la propia conciencia no necesita sentarse tieso como cadáver; si uno conoce la naturaleza de las formas los ocho deseos se desvanecen por sí solos; si no hay deseo ni odio en el corazón nada hay que pretender o demostrar. Nunca podrá alcanzarse la gran sabiduría ni el Trikaya que trasciende a samsara y nirvana mediante búsquedas o aspiraciones sin haber antes recibido la bendición del linaje.

Querido Maestro, el proverbio dice: Juzgando la cara del hombre sabe uno si ha comido o no. Del mismo modo puede detectarse fácilmente si se conoce o no el Dharma al comprobarse si se puede o no conquistar sus deseos y su apego egocéntrico. Si se puede, es prueba de que se conocen y practican las enseñanzas budistas.

Uno puede ser muy elocuente al hablar sobre el Dharma y ganar todos les debates, pero si no puede dominarse ni por un segundo el propio apego al ego o sus deseos sino que es indulgente consigo mismo en palabras y charlas, no se obtendrá ningún beneficio de sus victorias en debates, sino más bien incrementará con ello su egoísmo y orgullo. Ésta es la causa del eterno vagar en el ciclo de las reencarnaciones hasta caer al fondo.

Por lo tanto, toda argumentación, según puedo yo ver, es dañina y destructiva.

LOS TRES VIAJEROS

Viajar a muchos lugares solo sirve para nublar la devoción.

Impulsados por los tres deseos y por los pensamientos que fluyen, los seres provistos de sentimiento han vagado por las rutas interminables de los tres reinos, siempre sujetos a las cinco privaciones. Esta jornada es tan larga y azarosa que uno se siente muy cansado y exhausto.

Hay tres clases de viajeros en el camino:

La primera clase está compuesta por gente ordinaria que entra de manera espontánea al sendero peligroso y es automáticamente atrapada por los males del karma; ellos han de soportar todas las penalidades del nacimiento y de la muerte, vagando en los tres reinos de la reencarnación por siempre.

La segunda clase tiene algunos temores y azares, tal como la tercera; pero han recibido la instrucción y han aprendido a reconocer y a luchar contra las influencias dañinas y por eso, si tienen fe inquebrantable en el Buda y comprensión y anhelo por el dharma, junto con la armadura de una diligencia invencible, podrán lenta y gradualmente reconocer la verdad, el gozo y la emanación de Buda, observando cuidadosamente cómo decaen los sentidos y los elementos cada uno a su tiempo en el instante de la muerte.

La tercera clase no teme ni se preocupa por los peligros de la ruta ni por las trampas de los demonios, porque la práctica del dharma los ha capacitado para desvanecer los temores.

EL SENTIDO DE LA VIDA

¡Hay demasiados modos por los cuales perderse uno mismo y despilfarrar la vida!

La vida es muy corta, nadie puede decir cuándo le llegará la muerte. Así pues, olvida todo lo demás y concéntrate en tu meditación. La rueda de la reencarnación es en sí misma irracional e irreal; cuando se le mira se le encuentra difícil de definir, inasible, pero cuando uno lo realiza es el nirvana mismo.

Todas las cosas en sí mismas son vacío; un yogui no está apegado a nada.

Quien pierde una ocasión para el dharma nunca más tendrá otra. Cuanta insensatez desatender tu vida luchando contra tus enemigos, ellos son flores frágiles. Cuanta estupidez gastada en el tiempo de una vida sin significado, cuando tu cuerpo es un precioso y raro regalo. Cuan dignos de compasión son los seres que viven en la reencarnación. Mirando hacia arriba al sendero de liberación, ¿qué, si no tristeza, podrá sentirse por estos hombres?

Lamentable y tonto es complacerse en matar cuando por buena suerte y horma se tiene forma humana.

Es lamentable cometer un acto que al final nos dañará a nosotros mismos, es lamentable construir un muro de iniquidad hecho con la carne de nuestros semejantes, es lamentable ver devorar la carne y manar la sangre, es lamentable saber que confusión e ilusión alimentan las mentes de los hombres, es lamentable hallar solo vicio, no amor, en el corazón de la gente. Cuan lamentable es ver que la ceguera cubre a todos los hombres que fomentan actos inicuos.

La codicia es causa de miseria y los actos mundanos traen pena; recordando esto uno siente pesadumbre, así pensando, se busca curación. Cuando pienso en aquellos que nunca reparan en sus vidas futuras sino que se complacen en actos dañinos me siento conturbado y triste y temo profundamente por ellos. Toma en cuenta la gracia de tu gurú y evita todo acto pecaminoso, desecha las cosas mundanas y mantente firme en tu práctica, guarda tus votos y dedica tu vida a la meditación.

ENSEÑANZAS DE MILAREPA

Sus enseñanzas han sido superiores y de mayor alcance que la de los letrados

A diferencia de lo, líderes religiosos, Milarepa nunca intentó construir un templo ni formar una secta, ni organizar ninguna clase de orden. Su vida fue la de un yogui medicante que vivió en las más remotas montañas, vagando de uno a otro sitio como un santo trovador que predicaba el santo dharma a quien quisiera escucharlo. Aunque en su tiempo fue ridiculizado por los eruditos budistas que lo tildaban de ermitaño ignorante, la historia ha comprobado que sus enseñanzas han sido superiores y de mayor alcance que la de aquellos letrados.

Quizás la más grande contribución de Milarepa a la literatura budista haya sido demostrar la unidad e interdependencia de todas las enseñanzas esenciales del budismo.

Veamos algunas de sus enseñanzas...

PASIONES, DESEOS Y PLACERES

Tal como yo lo entiendo, todos los Dharmas son remedios para las pasiones humanas y los deseos, pero el modo como tú les practicas solo sirve para aumentar tus pasiones y deseos. Pero quien desconoce el daño de los placeres mundanos y desde el fondo de su corazón no renuncia a ellos, nunca escapará de la prisión del la reencarnación. Además, a cada instante los deseos incrementan la sed como el agua salada. Aunque es difícil evitar la atracción mundana; adhiriéndose a la humildad se domina el anhelo de vanagloria.

LA VERDADERA FE

La llamada fe de la gente común es inestable y sujeta a cambio, sin darse cuenta que el poder de nuestra fe puede destrozar rocas, partir la tierra y dividir el agua. Claro esta, si desde lo más hondo del corazón se toma una determinación, podrá uno practicar su devoción en cualquier circunstancia y cualquier tiempo.

LOS CONOCIMIENTOS

Palabras, libros, conocimiento, creencias y religión, hablar con honestidad y rectitud a las personas orgullosos y codiciosas es un desperdicio completo, porque aunque tengan mucho conocimiento, una inteligencia aguda y magia poderosa, son como fuego y leños chamuscando su mente. No importa mucho lo que sepan sobre las escrituras. Uno no solo debe atender palabras y libros, sino cerrar su boca, siguiendo sin error las instrucciones verbales del gurú, y meditar.

LA REALIDAD

Aunque parezca eterno todo lo que vemos pronto caerá hecho pedazos y desaparecera´.

Vivimos en tiempo de confusión. La corrupción y el vicio abundan por doquier. La gente es voraz y alberga intensos deseos y pasiones. Es éste un tiempo difícil para dominar los deseos y por lo tanto, debemos auto examinarnos viendo cuáles preceptos hemos de adoptar y cuáles rechazar.

ÉTICA Y COMPORTAMIENTO

Es lamentable cometer un acto que al final nos dañará a nosotros mismos.

Hay muchos que hacen el mal pero muy pocos que hagan el bien; todo el sufrimiento es retribución de algún pecado, toda alegría y virtud lo es de algún mérito; ambos se deben a lo que hacemos. La mejor cosa es no hacer lo malo, pero si lo has hecho y te quieres arrepentir sinceramente, es muy bueno. Así podrás comprender que todos los actos son intrínsecamente puros, pero nunca abandones ni la más pequeña virtud. Podrás comprender que todas las causas y los karmas son vacío, pero debes abstenerte de cometer la más pequeña transgresión.

El karma de causa y efecto no perdona a nadie porque la ley de causación no falla en traernos lo que merecemos.

LAS RIQUEZAS

Un rico escasamente disfruta el dinero que ha ahorrado.

Los hombres ricos son criaturas desgraciadas con dinero, los hombres pobres son criaturas desgraciadas sin dinero: con o sin dinero ambos son miserables. Mientras más propiedades tengamos, más sufriremos a la hora de la muerte. Si, como un miserable se anda siempre almacenando bienes, nunca se podrá tener éxito para ganar ma´s.

Vivir sin posesiones significa sin sufrimientos. Yo soy el hombre llamado Milarepa, tengo como posesión el no-deseo. Como no lucho para hacer dinero: en primer lugar, no sufro por el trabajo de obtenerlo; luego, no sufro para guardarlo, y, finalmente, no sufro tratando de acumular más.

Mucho mejor y más felicidad trae no tener posesiones.

VALORA TU SER

Llegó el tiempo de ayudarte a ti mismo.

Entre todas las cosas de valor, tú vales más.

Desde tiempo inmemorial hasta ahora todos hemos pasado por miríadas de formas de cuerpos en nuestras diferentes encarnaciones. Esto es comparable a la suma total de granos de arena en todo el vasto universo. Sin embargo, apenas hemos utilizado estos cuerpos con algún propósito digno. En lugar de eso, los hemos gastado en cosas sin sentido una y otra vez acumulando de esta manera más y más deudas y pesares.

El bardo entre el nacer y el morir es terreno propicio para sembrar la mente iluminadora. En él debe uno practicar las yogas de elevación y perfeccio´n.

LA MENTE

La verdadera raíz de la confusión también viene de la mente.

Toda manifestación, el universo mismo, está contenido en la mente; la naturaleza de la mente es el reino de la iluminación. La mente, siempre activa, es difícil de domar aun si se la encierra en una caja de hierro. Pero cuando mi cuerpo tiene la bendición del Gurú, puede hacer muchos milagros y muchas transformaciones. Pero cuando mi boca recibe la bendición del Gurú, puede entonar cantos líricos y dar instrucciones medulares. Pero cuando mi mente recibe la bendición del Gurú, comprende y es el Buda.

Si uno se apega a la realidad de las visiones se confundirá en su meditación. Si no sabe que todos los obstáculos revelan el vacío, la manifestación de la mente, estará confundido al meditar. La verdadera raíz de la confusión también viene de la mente. Quien comprende la naturaleza de la mente, ve la gran iluminación que ni llega ni parte. Al observar la naturaleza de las formas externas, se da cuenta que solo son visiones ilusorias de la mente. También ve la identidad de vacío y forma.

El pensamiento habitual, el amor y la posesividad, los tres, cuando surgen, surgen de la misma consciencia. Cuando desaparecen, ellos desaparecen dentro de la misma consciencia. Mi mente experta, la atención mental, debe vigilar constantemente al pensamiento caprichoso de la mente engañada para salvarle del desastre. En cualquier circunstancia, esté durmiendo, andando o comiendo, continúo meditando sin interrupción.

El DHARMA

¿Para qué practicar la Mente de la iluminación si nuestros actos están en conflicto con el dharma? Quien ha alcanzado el estado mas elevado de conciencia y se está fundiendo con el universo no necesita compañía; quien ha obtenido la auto liberación no necesita consorte.

Si no, ¿qué utilidad o qué sentido tendrían este largo trabajo y esta meditación? Si yo, Milarepa, persiguiera el oro mi renunciación sería hueca. Dharma no desea oro, de lo contrario sus logros no tendrían valor. No busca ganancia, de lo contrario sus aprendizajes no tendrían sentido.

LOS CANTOS DE MILAREPA

Milarepa tenía una hermosa voz y cantaba bellamente.

Desde joven se dedicó al canto de las tonadas populares y fue reconocido como un buen cantante. Nadie sabe cuántos cantos y poemas compuso; las tibetanas dicen que cerca de cien mil. Y tal vez esto no es exagerado si se considera que durante más o menos la mitad de su vida utilizó el canto como medio de comunicar sus ideas y transmitir sus enseñanzas. Sus cantos son un legado inestimable de experiencias yoga, instrucciones y prácticas de meditación. Para yoguis serios y practicantes del dharma, son en verdad una guía preciosísima.

Veamos tres de sus mas famosos cantos...

EL CANTO DE LAS SIETE VERDADES

El canto de Milarepa que encierra las siete verdades.

A ti, Marpa el Traductor, mi reverencia;
te ruego incrementes en mí la mente de la iluminación

Sea cual fuere la belleza de un canto,
será solamente un sonido para aquellos
que no captan la verdad.

Si una parábola no está acorde con la enseñanza del Buda,
a pesar de la mucha elocuencia que pueda tener
no pasará de ser solo un simple eco.

Si uno no practica el dharma,
aunque se proclame muy erudito en la doctrina,
solo será un auto engañado.

Vivir en soledad es aprisionarse a sí mismo,
si uno no practica la instrucción de la Transmisión Oral.
Trabajar en el campo no es sino un castigo,
si uno descuida la enseñanza del Buda.

Para aquellos que no guardan su moral,
las oraciones son solo deseos.
Para quienes no practican lo que predican,
la oratoria es una pérfida mentira.

Evitar las malas acciones amengua en sí los pecados;
hacer buenas obras es ganar méritos.
Permanezcan en soledad y mediten a solas.
El mucho hablar no es de ningún provecho.
¡Sigan mi canto y practiquen el dharma!

EL CANTO DE LA SABIDURÍA

El canto de Milarepa que encierra su profunda sabiduría.

Yo soy Milarepa, de gran fama,
hijo directo de sabiduría y memoria;
Empero soy un anciano, abandonado y desnudo.

De mis labios brota una cancioncilla,
pues toda la naturaleza a la que contemplo me sirve de libro.

El cayado de hierro, que mis manos sostienen,
me guía por el océano de la vida mutable.

Soy amo de la mente y de la luz;
Y, el mostrar hazañas y milagros,
no depende de las deidades terrenas.

EL CANTO A LOS APEGOS

El canto de Milarepa que encierra el significado de los apegos.

Preferir las diversiones a la soledad,
amar el placer y odiar el trabajo,
anhelar la charla cuando urge meditar,
revolcarse arrogantemente en el mundo;
Estos cuatro modos nunca llevarán a la liberación.

Mi única posesión: El no-deseo.

Milarepa


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