Basura emocional - Reflexión
Acumulamos basura emocional: rabia, resentimiento, culpa, rencor, miedo, complejos, derivados de las experiencias diarias. Que debemos tirar afuera.
LUZ HOYOS
SACA TU NEGATIVISMO
Vamos por la vida acumulando basura emocional: rabia, resentimiento, culpa, rencor, miedo, complejos, derivados de las experiencias diarias. Así como nos deshacemos diariamente de la basura material, de igual manera, y con mayor razón, debemos tirar afuera la basura emocional.
Pautas para lanzar afuera la basura emocional
- Pon atención a tu dialogo mental y convoca pensamientos enfocados en tus fortalezas y potencialidades. Afuera los pensamientos negativos, derrotistas, los que hablan de tus debilidades. Pon lejos ese garrote invisible y cruel con el que te flagelas a diario, comparándote con los demás, buscando la perfección.
- Ponte metas a corto y mediano plazo: alcanzables, factibles, metas realistas que guarden relación y coherencia con tu momento presente, de tal forma no acumularas frustraciones.
- Actitud mental propositiva: el tema de la actitud es un tema muy trillado, pero sigue teniendo tanta vigencia como el uso de andar parado. Pues bien, párate de la cama con una actitud de ganador, la actitud determina como empieza y como terminas el día. Estimúlate frente al espejo, ve frente a él y mirándote a los ojos saluda a la persona más importante del universo: di: te quiero y te acepto tal como eres.
- Planeación y acción: establecer el itinerario de cada día es el camino más seguro para no perder de vista las actividades diarias. No solo escribir, planear, llevar a la acción, para sentirte empoderado en tu plan de vida.
- Dile adiós a la comodidad de tu zona de confort: la zona de confort nos brinda seguridad, confianza, involucra caminar por el camino conocido, sin retos. Salir de la zona de confort implica arriesgarte a conocer, explorar, investigar, aprender.
- Siéntete merecedor: a veces no logramos las cosas porque somos nuestros peores detractores, siéntete merecedor y conviértete en tu mejor aliado. El paso número tres te impulsara a ello.
- Aprende a poner límites: cuando no aprendes a poner límites fácilmente te conviertes en la alfombra de los otros. Aprender a poner límites hace parte del autocuidado.
- Evaluación: frente a un error, una mala experiencia, una frustración, una ruptura, evalúa el aprendizaje. Vas a sentir dolor, pero sufrir es tu decisión.