POR: ELIZABETH GILCHRIST B
Existen maneras de elevar nuestro nivel de vibración.
El perdón es una decisión, no un sentimiento, porque cuando perdonamos no sentimos más la ofensa, no sentimos más rencor. Perdona, que perdonando tendrás en paz tu alma y la tendrá el que te ofendió. Madre Teresa de Calcuta
CCuando empezamos a vivir teniendo conciencia de lo que pensamos, decimos y hacemos, se inicia un impresionante proceso de transformación que produce sanación en todos los niveles del ser humano: físico, espiritual y mental. La vida y todo lo que nos rodea adquiere un nuevo matiz dándole sentido a la existencia. Empezamos a sentirnos UNO con el Universo mismo y empezamos a comprender que lo que le hago a otro, me lo hago a mí mismo.
Existen muchísimas maneras de elevar nuestro nivel de vibración. Yo iniciaría este proceso de cambio perdonando todo y a todos. No existe nada más liberador y por consiguiente sanador, que el perdón. Primero perdón hacia uno mismo y luego hacia los demás. Al perdonar y perdonarnos renace la paz interior.
Cantar, soñar, reír, disfrutar el silencio, orar, escuchar música suave, leer, amar, caminar descalzo en la grama, hacer ejercicio, meditar, respirar correctamente, estar en contacto con la naturaleza, compartir en familia, jugar con los niños, volvernos niños, jugar con nuestras mascotas, vestir con colores claros, especialmente el blanco, adoptar una postura derecha, soltar los apegos, hacer sonreír a otro ser humano, decretar yo puedo, yo soy capaz, yo creo en mí , vivir con consciencia y crear con consciencia, son acciones que elevan nuestro nivel de vibración.
También lo harán actitudes como la paciencia, la humildad, el perdón, la benevolencia, la sinceridad, la honestidad, el respeto a todo lo creado, la comprensión, la compasión, el servicio al otro, la fe, la tolerancia, el buen sentido de humor, el respeto por el otro, el vivir agradecidos por todo, no juzgar ni criticar, el vivir la experiencia sexual desde el Amor y la ternura, el despertar con optimismo y alegría, buscar la imperturbabilidad, amarnos y aceptarnos con Amor. Recuerda que nadie puede ofender a quién se Ama a sí mismo.
El descanso y una alimentación sana elevan nuestro nivel de vibración, por lo cual debemos alimentarnos con alimentos vivos de alta vibración: tomar agua pura, comer alimentos alcalinos como frutas, verduras, granos y semillas, respetando la vida en todas sus formas.
Se dice que el ayuno nos ayuda a purificar nuestro cuerpo y despierta la conciencia, por lo cual eleva nuestro nivel de vibración.
Al comprender que somos parte del TODO, que todos somos UNO con el Creador, al sabernos únicos, eternos y libres, portadores de una PARTÍCULA DIVINA, nuestro espíritu crece. Este conocimiento nos ayuda a trascender las limitaciones autoimpuestas por una baja autoestima o desamor.
Si deseamos avivar nuestro espíritu debemos vivir en coherencia, es decir, siendo consistentes con lo que pensamos, decimos y hacemos, optando por la felicidad como un hábito, aprendiendo a controlar nuestras propias vibraciones, enviando Amor al Universo.
Seres de Luz nos acompañan en todo momento y qué mejor manera de elevar nuestro nivel de vibración que pedirles orientación y guía. Ellos respetan nuestras decisiones y esperan ansiosos la llamada de ayuda, dirección y protección diaria.
Otra poderosísima manera de elevar nuestro nivel de vibración es viviendo en el aquí y en el ahora, en un estado de profundo agradecimiento por existir, sabiendo que todo es perfecto, simplemente siendo, ¡Amando todo y a todos!
Contrario a lo que yo aprendí desde pequeña, creyendo que debíamos sufrir para purificarnos, Nuestro Padre nos creó en un instante de Amor para que seamos intensamente felices. La vida es hermosa. ¡Juega, disfruta y pásalo bien!
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