No es necesario cambiar la realidad, sino solo la forma en que la ves. Los verdaderamente despiertos ya no están a merced de la ilusión y la imaginación.
El mundo objetivo es la primera capa de la existencia; si te pierdes en ello te mantendrás con lo más superficial perdiéndote lo bello de la realidad.
Si no puedes ver la realidad carente de palabras te sentirás frustrado, siempre te sentirás así porque tomarás lo que aparenta la palabra por la realidad.