LA ILUMINACIÓN ESPIRITUAL
OSCAR WILDE
Es rápido mudar el cuerpo que instalar el alma. Ella necesita tiempo, silencio, necesita entrar en cada rincón, reconocerlo, instalar su energía.
Una nota de Sergio Sinay antes de leer a Oscar Wilde
Una casa es el lugar que habitamos físicamente. Un hogar es el lugar que habitamos con nuestra alma. Una casa es una construcción que puede permanecer vacía, sin habitantes, y seguirá siendo una casa. Un hogar es inconcebible sin personas.
Leo una entrevista a la gran escritora (novelista y ensayista) estadounidense Joyce Carol Oates realizada por Jesús Ruiz Mantilla, de El País Semanal, de Madrid, y me provoca estas reflexiones. “Si te alejas mucho de tu hogar pierdes tu alma”, dice Oates.
Pienso en los edificios en construcción que brotan como hongos en la ciudad. En los avisos de costosos departamentos en los suplementos de propiedades. Todas esas son casas. Sólo Dios sabe cuántas de ellas se convertirán en hogares.
Crisis de vivienda no significa crisis de hogares. Me pregunto cuánta gente tiene muchas propiedades, muchas casas, y ningún hogar. Pienso en muchos otros que, acaso, no tienen una casa propia y, sin embargo, habitan un hogar, han hecho del lugar en el que viven un espacio para el alma.
Cuando tanta gente vive de mudanza en mudanza, a casas cada vez más grandes, más lujosas, más costosas, ¿lo hacen porque necesitan una casa mejor o porque no logran dar con un hogar? El alma suele moverse a ritmos diferentes de los del cuerpo.
Es más rápido mudar el cuerpo que instalar el alma. Ella necesita tiempo, necesita silencio, necesita entrar en cada rincón, reconocerlo, instalar su energía. Cuando el alma no se instala, no hay hogar. Muchas casas son habitadas por cuerpos que las transitan como fantasmas sin convertirlos en hogares.
Para construir un hogar hay que dejar de lado muchas falsas prioridades, hay que abandonar ostentaciones y frivolidades. Los hogares no se exhiben. Se viven. Y se construyen desde adentro.
Oscar Wilde
Cada tarde, a la salida de la escuela, los niños se iban a jugar al jardín del Gigante. Era un jardín amplio y hermoso, con arbustos de flores y cubierto de césped verde y suave. Por aquí y por allá, entre la hierba, se abrían flores luminosas como estrellas, y había doce albaricoqueros que durante la Primavera se cubrían con delicadas flores color rosa y nácar, y al llegar el Otoño se cargaban de ricos frutos aterciopelados. Los pájaros se demoraban en el ramaje de los árboles, y cantaban con tanta dulzura que los niños dejaban de jugar para escuchar sus trinos.
¡Qué felices somos aquí! se decían unos a otros. Pero un día el Gigante regresó. Había ido de visita donde su amigo el Ogro de Cornish, y se había quedado con él durante los últimos siete años. Durante ese tiempo ya se habían dicho todo lo que se tenían que decir, pues su conversación era limitada, y el Gigante sintió el deseo de volver a su mansión. Al llegar, lo primero que vio fue a los niños jugando en el jardín.
Los niños escaparon corriendo en desbandada.
Y, de inmediato, alzó una pared muy alta, y en la puerta puso un cartel que decía:
ENTRADA ESTRICTAMENTE PROHIBIDA BAJO LAS PENAS CONSIGUIENTES
Era un Gigante egoísta…
Los pobres niños se quedaron sin tener dónde jugar. Hicieron la prueba de ir a jugar en la carretera, pero estaba llena de polvo, estaba plagada de pedruscos, y no les gustó. A menudo rondaban alrededor del muro que ocultaba el jardín del Gigante y recordaban nostálgicamente lo que había detrás.
Cuando la Primavera volvió, toda la comarca se pobló de pájaros y flores. Sin embargo, en el jardín del Gigante Egoísta permanecía el Invierno todavía. Como no había niños, los pájaros no cantaban, y los árboles se olvidaron de florecer. Sólo una vez una lindísima flor se asomó entre la hierba, pero apenas vio el cartel, se sintió tan triste por los niños que volvió a meterse bajo tierra y volvió a quedarse dormida.
Los únicos que ahí se sentían a gusto eran la Nieve y la Escarcha.
La Nieve cubrió la tierra con su gran manto blanco y la Escarcha cubrió de plata los árboles. Y en seguida invitaron a su triste amigo el Viento del Norte para que pasara con ellos el resto de la temporada. Y llegó el Viento del Norte. Venía envuelto en pieles y anduvo rugiendo por el jardín durante todo el día, desganchando las plantas y derribando las chimeneas.
Y vino el Granizo también. Todos los días se pasaba tres horas tamborileando en los tejados de la mansión, hasta que rompió la mayor parte de las tejas. Después se ponía a dar vueltas alrededor, corriendo lo más rápido que podía. Se vestía de gris y su aliento era como el hielo.
No entiendo por qué la Primavera se demora tanto en llegar aquí decía el Gigante Egoísta cuando se asomaba a la ventana y veía su jardín cubierto de gris y blanco, espero que pronto cambie el tiempo.
Pero la Primavera no llegó nunca, ni tampoco el Verano. El Otoño dio frutos dorados en todos los jardines, pero al jardín del Gigante no le dio ninguno.
De esta manera, el jardín del Gigante quedó para siempre sumido en el Invierno, y el Viento del Norte y el Granizo y la Escarcha y la Nieve bailoteaban lúgubremente entre los árboles.
Una mañana, el Gigante estaba en la cama todavía cuando oyó que una música muy hermosa llegaba desde afuera. Sonaba tan dulce en sus oídos, que pensó que tenía que ser el rey de los elfos que pasaba por allí. En realidad, era sólo un jilguerito que estaba cantando frente a su ventana, pero hacía tanto tiempo que el Gigante no escuchaba cantar ni un pájaro en su jardín, que le pareció escuchar la música más bella del mundo. Entonces el Granizo detuvo su danza, y el Viento del Norte dejó de rugir y un perfume delicioso penetró por entre las persianas abiertas.
¿Y qué es lo que vio?
Ante sus ojos había un espectáculo maravilloso. A través de una brecha del muro habían entrado los niños, y se habían trepado a los árboles. En cada árbol había un niño, y los árboles estaban tan felices de tenerlos nuevamente con ellos, que se habían cubierto de flores y balanceaban suavemente sus ramas sobre sus cabecitas infantiles. Los pájaros revoloteaban cantando alrededor de ellos, y los pequeños reían. Era realmente un espectáculo muy bello. Sólo en un rincón el Invierno reinaba. Era el rincón más apartado del jardín y en él se encontraba un niñito. Pero era tan pequeñín que no lograba alcanzar a las ramas del árbol, y el niño daba vueltas alrededor del viejo tronco llorando amargamente. El pobre árbol estaba todavía completamente cubierto de escarcha y nieve, y el Viento del Norte soplaba y rugía sobre él, sacudiéndole las ramas que parecían a punto de quebrarse.
El Gigante sintió que el corazón se le derretía.
Estaba de veras arrepentido por lo que había hecho.
Bajó entonces la escalera, abrió cautelosamente la puerta de la casa, y entró en el jardín. Pero en cuanto lo vieron los niños se aterrorizaron, salieron a escape y el jardín quedó en Invierno otra vez. Sólo aquel pequeñín del rincón más alejado no escapó, porque tenía los ojos tan llenos de lágrimas que no vio venir al Gigante. Entonces el Gigante se le acercó por detrás, lo tomó gentilmente entre sus manos, y lo subió al árbol. Y el árbol floreció de repente, y los pájaros vinieron a cantar en sus ramas, y el niño abrazó el cuello del Gigante y lo besó. Y los otros niños, cuando vieron que el Gigante ya no era malo, volvieron corriendo alegremente. Con ellos la Primavera regresó al jardín.
Al mediodía, cuando la gente se dirigía al mercado, todos pudieron ver al Gigante jugando con los niños en el jardín más hermoso que habían visto jamás.
Estuvieron allí jugando todo el día, y al llegar la noche los niños fueron a despedirse del Gigante.
El Gigante lo quería más que a los otros, porque el pequeño le había dado un beso.
No lo sabemos respondieron los niños, se marchó solito.
Pero los niños contestaron que no sabían dónde vivía y que nunca lo habían visto antes. Y el Gigante se quedó muy triste.
Todas las tardes al salir de la escuela los niños iban a jugar con el Gigante. Pero al más chiquito, a ese que el Gigante más quería, no lo volvieron a ver nunca más. El Gigante era muy bueno con todos los niños pero echaba de menos a su primer amiguito y muy a menudo se acordaba de él.
Fueron pasando los años, y el Gigante se puso viejo y sus fuerzas se debilitaron. Ya no podía jugar; pero, sentado en un enorme sillón, miraba jugar a los niños y admiraba su jardín.
Una mañana de Invierno, miró por la ventana mientras se vestía. Ya no odiaba el Invierno pues sabía que el Invierno era simplemente la Primavera dormida, y que las flores estaban descansando.
Sin embargo, de pronto se restregó los ojos, maravillado, y miró, miró…
Era realmente maravilloso lo que estaba viendo. En el rincón más lejano del jardín había un árbol cubierto por completo de flores blancas. Todas sus ramas eran doradas, y de ellas colgaban frutos de plata. Debajo del árbol estaba parado el pequeñito a quien tanto había echado de menos.
Lleno de alegría el Gigante bajó corriendo las escaleras y entró en el jardín.
Pero cuando llegó junto al niño su rostro enrojeció de ira, y dijo:
Entonces el niño sonrió al Gigante, y le dijo:
Y cuando los niños llegaron esa tarde encontraron al Gigante muerto debajo del árbol. Parecía dormir, y estaba entero cubierto de flores blancas.
OMRAAM MIKHAEL
El limpiador de tu alma es el perdón. Deberás usarlo todo el tiempo apenas veas una impureza, aplicarlo, no te acuestes nunca sin haber pedido perdón.
OSHO
Muchas almas superiores no entran en vientres corrientes necesitan vientres extraordinarios una pareja con un nivel excepcional elevado de conciencia.
FRASES ALMA
Desde la perspectiva religiosa la iglesia no solo apoyó sino que tuvo sus propios esclavos desde su fundación. Recordemos que Jesús no fundó Iglesias.
RAJINDER SINGH
El alma con poder infinito es fuerte y resistente, pero la naturaleza del mundo es tal que la mente tiene ventaja, ella opera en su propio territorio.
OSHO
En realidad, no importa cómo lo llamemos; nos equivocaremos. Toda conceptualización yerra con lo Real; cualquier conceptualización es ajena al alma.
EL HOMBRE AUTO REALIZADO ESTA EN CALMA
OSHO
La naturaleza no te está obligando a realizarte. Eres libre. Puedes elegir realizarte; puedes elegir no hacer nada al respecto. Eres como una semilla.
PARADIGMA
El alma superior necesita la unión de una pareja con un nivel excepcional elevado de conciencia, para unas mejores posibilidades para el nacimiento.
SACERDOTES Y POLITICOS LA MAFIA DEL ALMA
OSHO
Por ejemplo, un ciego no puede pensar en los colores porque no los ha visto; por lo tanto ese reflejo no es posible. El ciego ni siquiera sabe si hay.
INTERACCION ENTRE CUERPO Y ALMA
BERT HELLINGER
La sanación depende de determinados procesos en el alma; es decir, junto con el tratamiento médico hay que reconocer y poner en orden algo en el alma.
RAJINDER SINGH
Las capas sobre el alma. Obstáculos que se acumulan hasta obscurecer la divinidad de nuestra alma. Al quitar estas capas se revela el brillo del alma.
OSHO
El Prelado vuelve la cara hacia otro lado mientras viaja por el mundo para no ver esta infamia olvidando que Jesucristo predicó el respeto a la niñez.
PUNTO DE VISTA DE LA REENCARNACION
FRASES REENCARNACION
Buda y otros son semillas perfectas. Seres como el Cristo son dueños del campo. Por lo tanto, esos seres ENCARNAN, en tanto nosotros RE-ENCARNAMOS.
OBSERVAR ES LA CUALIDAD DEL ALMA
OSHO
Observar es la cualidad del alma, de la consciencia. Observar no es un proceso mental en absoluto. Si observas, la mente se detiene, deja de existir.
EL ALMA PERFECTA HUMANA ES ETERNA E INMORTAL
SWAMI VIVEKANANDA
El alma perfecta humana es eterna e inmortal. El Maestros de la India Swami Vivekananda lo explica en este hermoso artículo de forma clara y precisa.
TRES PREGUNTAS ALMA Y SUBCONSCIENTE
FRASES ALMA
La actual ciencia humana iguala inconscientemente al alma con el subconsciente. Esto es producto de la ignorancia y del desconocimiento espiritual.
AMPLIANDO EL TEMA DE LA REENCARNACION
FRASES REENCARNACION
Las apariciones sucesivas del alma en una tierra o en muchas, forma una serie de personalidades que adopta una misma individualidad que reencarna.
FRASES ALMA
La música puede ser una cura para el alma, o mejor dicho para la mente. Incide positivamente en la salud, tanto física como el bienestar psicológico.
JEBUNA
En cada reencarnación la existencia reclama sin cesar en cada ser su máxima expresión de luz y de amor para ofrecer el cielo, la plena vida eterna.
LA CALMA Y LA QUIETUD DE TU MENTE
JEBUNA
Estar alertas es estar en reposo, solo la paz en nuestro interior y la serenidad, pueden dar la luz que todo lo ve, la que ilumina nuestro sendero.
TERGIVERSACION DEL CONCEPTO DE LA REENCARNACION
MARIANELA GARCET
A pesar de la tergiversación del concepto de la reencarnación más de la mitad de la humanidad considera que un ser se pueda reencarnar varias veces.
JEBUNA
Los Maestros enseñan que renunciar a nuestros deseos, es fórmula astuta para evitar el peligro de volver a quedar atrapados en los nodos planetarios.
CONEXION DE ESPIRITU A ESPIRITU
FRASES FAMOSAS
Hubo un momento en la historia de la humanidad en que se dejó de lado lo espiritual para darle más peso e importancia a lo científico y racional.
LA CONCIENCIA DEL ALMA EXISTE EN LA VIDA
GARY ZUKAV
La conciencia del alma es ser totalmente consciente, estar vivo, sin estar limitado por nada. Si amas sin razón alguna, entonces eres un alma que existe.
DIOS Y EL ALMA DE AMOR DE JUAN DE LA CRUZ
JUAN DE LA CRUZ
Escrito sobre Dios y el alma de amor de Juan de la Cruz que trasciende lo religioso profundizado en el amor espiritual puro que revela la divinidad de Dios.
EL HOMBRE AUTO REALIZADO ESTA EN CALMA
OSHO
La naturaleza no te está obligando a realizarte. Eres libre. Puedes elegir realizarte; puedes elegir no hacer nada al respecto. Eres como una semilla.
FRASES DIOS
Muchos piensan que sólo lo material es real por lo tanto, lo que no es material carece de realidad y debe excluirse de la propia vida por innecesario.
LA VIDA DEL ALMA ILUMINADA Y LIBRE DE EGO
RAMANA MAHARSHI
Para entender la vida del alma iluminada y libre de ego el Maestro Ramana Maharshi explica en profundidad y bajo su perspectiva su esencia para la práctica.
RAJINDER SINGH
Dentro de nuestras formas externas yace el alma. En esencia no somos diferentes. Somos amor, somos conciencia, somos luz, somos inmortalidad total.
LA INTUICION SON GUIAS ESPIRITUALES DEL ALMA
SONIA CHOQUETTE
Tu cualidad de testigo puede aprovechar los guías del alma: el del espíritu es la intuición, el del cuerpo es el instinto y el del intelecto es la cabeza.
MUCHAS GRACIAS
ADVERTENCIA A LOS LECTORES