El regalo del tiempo

El tiempo es un regalo empacado junto con el de la reencarnación es para espíritus en reparación. Es necesario que lo aprovechemos de la mejor manera.

JEBUNA

EL OBSEQUIO DEL TIEMPO

Todo sucede en un presente absoluto en el aquí y en el ahora.

Discernir sobre el tiempo no es tarea fácil se los aseguro. Hago un gran esfuerzo por tratar de ser lo más claro posible. Paciencia que con estos artículos sé que hay mucho de espiritualidad, se los aseguro. El tiempo, no se puede negociar ni trasferir y mucho menos regalar. Sera que algún día se manifieste como lo que es en realidad, o si de una vez por todas quede claro de que trata.

Miremos. El tiempo es como una sensación que cada ser percibe de acuerdo con su armonía con el universo, esta emoción, ningún reloj podrá medir con exactitud. Con el amor sucede algo similar, no existe algo que lo mida realmente, pero podemos utilizar abrazos y expresiones de afecto para poder sincronizar las percepciones que cada ser tiene con el amor.

Cuando duermes, dejas de percibir el tiempo, el tiempo parece detenerse. Nuestro cuerpo es como un instrumento que permite ubicarnos con la realidad manifestada del universo. El tiempo pasado y futuro no existen, solo existen como un presente absoluto en forma continua que solo se puede percibirse como una ilusión.

Todo sucede en un presente absoluto, aun en el lugar más distante del universo la manifestación fluye en el mismo instante. Nada puede ir más adelante ni más atrás en el tiempo, aun en el caso relativo del sueño, el presente absoluto sigue actuando acá y ahora sin importar las distancias cosmológicas, sin importar el estado del ser, ni su ubicación.

Muchos científicos han pensado y tratando de explicar el fenómenos del tiempo con elaboradas teorías matemáticas. Tanto la cuántica como la relatividad nunca podrán sumergirse en las verdades absolutas de la espiritualidad. El tiempo, no es como un átomo que puede ser sometido a intensos análisis para su entendimiento. El tiempo, como manifestación incorpórea, procede del estado espiritual de un absoluto, sin principio ni fin.

Todo en el universo está conectado y a su vez todo lo que está conectado es universo. La ley de correspondencia muestra la diferencia entre la cuántica y la espiritualidad. La cuántica, está totalmente presente, pero no tiene voluntad, la espiritualidad le da vida, la une. Todo es mente, todo es voluntad que hacer vibrar la cuántica para que esta a su vez haga que la relatividad se manifieste.

CONCLUSIÓN

El tiempo es como una especie de regalo empacado junto al de la reencarnación, es para espíritus en reparación. Señores, no es necesario que lo entendamos, pero sí que lo aprovechemos de la mejor manera. Este artículo no es para resolver los misterios del tiempo, pero si al menos poder ver la verdadera esencia de su existencia. Disfrútenlo. Recuerden: La impaciencia aparece cuando no aceptamos que todo tiene su tiempo.