La iluminación espiritual
El alma siempre sabe que hacer para sanarse a si misma. El desafío es silenciar la mente.
Su valentía y el deseo de sanarse eran tan grandes que eligió este plan de vida, no a pesar de estas dificultades, sino debido a ellas.
Nosotros los humanos hemos perdido la sabiduría de descansar y relajarnos. Nos preocupamos demasiado. No permitimos a nuestros cuerpos, mentes y corazones sanarse.