La iluminación espiritual

Dolor y alegría

BIENAVENTURADOS

  • Bienaventurado el Mahatma Gandhi que fue el que dijo que hace casi dos mil años que estamos festejando el amor; o sea, el nacimiento de Jesús, no el de Herodes.
  • Bienaventurado el que no cambia el sueño de su vida por el pan de cada día.
  • Bienaventurado el que sabe que compartir un dolor es dividirlo y compartir una alegría es multiplicarla.
  • Cuando un pueblo trabaja Dios lo respeta. Pero cuando un pueblo canta, Dios lo ama.
  • El amor nunca se muere, solo cambia de lugar.
  • El conquistador por cuidar su conquista, se convierte en esclavo de lo que conquistó. Es decir, que jodiendo se jodió.
  • El exceso de información ya es obra de deformación.
  • El que no está dispuesto a perderlo todo, no está preparado para ganar nada.
  • El Señor no nos va a preguntar que hicimos con el dinero, sino qué hicimos con la alegría, inevitable para vivir.
  • En una eternidad siempre se puede empezar de nuevo.
  • Escapa de los que compran lo que no necesitan, con dinero que no tienen, para agradar a gente que no vale la pena.
  • Estábamos un día en Nueva York y, a la salida del teatro Lincon Center, se me acercó un periodista y me espetó: Señor Cabral, Yo estoy de acuerdo en todo lo que usted ha dicho esta noche, excepto en que Dios es siempre justo. Si Dios fuera siempre justo, usted debería tener tanto difusión, tanto éxito como Julio Iglesias. A lo que yo le respondí: Claro que Dios es siempre justo. Julio Iglesias tiene más difusión, más éxito que yo puesto que necesita del dinero mucho más que yo para vivir. Yo, que necesito más libertad que Julio para vivir, por eso Dios me hizo más libre.
  • Esto confirma lo que siempre sospeché: nos queremos, por eso nos juntamos.
  • Fui analfabeto hasta los 14 años, por eso cuando me dicen ‘no puedo’, yo les digo ‘no jodas’.
  • La gente es todo lo vieja que quiera ser. He visto algunas muchachas con 20 años y estar totalmente envejecidas, por el contrario, conozco a una muchachita con 83 años, Teresa de Calcuta, que nos enseña a vivir todos los días.
  • La humanidad no es una caravana de desesperados, sino una bendita familia festejando el amor.
  • La ignorancia es un modo inconsciente del mal.
  • La maestra de mi pueblo se llamaba Dorotea. Era muy respetada por todos. ¡Por eso se marchó del pueblo, para ver si tenía más suerte!.
  • La pobreza no es una virtud, salvo que favorezca tu libertad.
  • La sociedad humana esta tan mal por las fechorías de los malos, como por el silencio cómplice de los buenos.
  • La vida es el presente y eternamente lo has de gozar.
  • La vida es hambre o festín. Tú eliges.
  • Mira si será malo el trabajo, que deben pagarte para que lo hagas.
  • No canto por cantor, sino que digo por hombre.
  • No era tan inteligente, seguro se perdió.
  • Nunca voy con los que lloran y siempre con los que cantan. Los paisanos de mi pueblo cuando tienen un dolor, en lugar de andar llorando, cantan debajo del sol.
  • Olvidar cosas malas, también es tener buena memoria, decía Martín Fierro. Yo digo: el olvido es una gentileza de Dios.
  • Para vivir mejor, hay que ser mejor. Nadie puede hacerlo por vos.
  • ¿Para qué quiero yo una agenda si solo hago lo que amo?.
  • Por el mundo caminado, he podido comprobar que el que fácilmente halaga, fácilmente insultará.
  • ¿Qué es eso de andar escondiendo lo que el Señor te dio para compartir?.
  • Que no nos distraigan las noticias.
  • Si amas al dinero a lo sumo llegarás a un banco, pero si amas a la vida, seguramente llegarás a Dios.
  • Si los malos supieran lo buen negocio que es ser bueno, serían buenos, aunque solo fuera por negocio.
  • Siempre, con lo que tengas, se puede, se debe empezar de nuevo. Tenemos el deber de ser felices.
  • Solo debes hacer lo que amas.
  • Tienes un cerebro como Einstein, tienes un corazón como Jesús, tienes dos manos como la Madre Teresa, tienes una voluntad como Moisés, tienes un alma como Gandhi, tienes un espíritu como Buda. Entonces, cómo puedes sentirte pobre y desdichado.
  • Un hombre que habla con las palomas no está loco, sino, benditamente enamorado.
  • Soy repetidor de Whitman, a quien amé hasta el plagio.