La iluminación espiritual

El dinero abrió el infierno

POR: OSHO

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EL DINERO Y EL AMOR

Con el dinero se puede poseer muchas cosas materiales pero no se puede poseer ni a la persona más pequeña. Las personas que empiezan a amar al dinero, que les permite obtener cosas, no aman a las personas. Con el dinero se pueden obtener numerosas cosas y cuanto más cosas se pueden tener, más se olvidan a las personas. Se obtendrán muchas cosas pero, no satisfacciones. Las personas que aman a las cosas viven una vida mecánica, nada vibra en ellas, están muertas como las cosas mismas. No poseen la libertad que da el amor. Si le das libertad al amor puedes darte libertad.

A la gente que ama no le importa el dinero, mientras que se siente posesiva con el dinero si le teme al amor. El amor te convierte en rey, porque el amor es un reino que no se puede comprar, es una satisfacción tan profunda que si tienes amor o has sido amado, podrás ser mendigo y estar contento. Esto no significa que no se debe usar el dinero, sino que hay que entender, para saber usarlo. Aquel que comprende, comparte el dinero, porque éste es para la vida y no para sí mismo.

El dinero es el medio mientras que el amor es la meta, mientras que los que persiguen al dinero lo convierten en la meta. El fenómeno del dinero es muy complejo, tiene un gran atractivo porque se puede poseer completamente. A diferencia del dinero, el amor no es dócil, es rebelde, no se puede poseer. Se puede poseer a un hombre o a una mujer, pero no se puede poseer su amor, cuando se los posee estos pasan a ser una cosa.

Lo peor que puede ocurrir es que el dinero se vuelva una meta, no significa que no se pueda usar, ni por eso que debamos convertirnos en mendigos, lo que no se debe hacer es obsesionarse con él. Puede ser hermoso, si no se convierte en una posesión.

Mientras el dinero circula y se mueve constantemente de mano en mano en la sociedad, ésta se mantiene viva. Cuando un avaro aparece, cuando alguien comienza a acumular el dinero, este deja de circular, se produce un bloqueo que no permite que los demás vivan. El dinero deja de circular y el dinero que no circula es muerte.

Osho está a favor del dinero que circula, para que todos lo puedan usar y para que nadie se aferre a él. El dinero pasa a ser más valioso cuanto más se usa, cuando hay más circulación, hay más dinero. Nos debemos convertir en avaros y en renunciantes a la vez, debemos poseer el dinero, producirlo y usarlo, para que vuelva a circular. De esta manera se puede disfrutar de todas las cosas que podemos adquirir con el dinero.

Uno sabe lo que el dinero puede dar, cuando nos permite vivir bien, adquirir una gran casa, y tener un hermoso auto, te puede dar todo lo externo, las cosas del mundo. El problema surge cuando el dinero no te puede dar amor, cuando se espera demasiado del pobre dinero. Son neuróticos aquellos que no quieren tocar el dinero, como lo son, aquellos que viven contando el dinero aquel al que le brillan los ojos cuando mira sus billetes. El dinero es bello hasta donde llega y en el mundo exterior llega bastante lejos. Lo que no se debe hacer es esperar amor, éste pertenece a nuestro interior, al ser interno. Tenemos que aprender a usar cada cosa según sus propias aptitudes, no para tus sueños. Debemos saber usar el dinero y no pedirle lo que no puede dar, el amor o a Dios por ejemplo. De todas maneras puedes vivir bien disfrutando del dinero, este te puede dar un mundo hermoso. Es bueno mirar la creación de Dios, que esta afuera y es bueno mirar hacia adentro, donde esta sentado el Creador. Adentro esta el hermoso Dios y afuera esta la hermosa creación, el adentro y el afuera se funden en uno solo.


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