Citas Falsa
La voz mas falsa es la que viene del dolor y la justa de la paz.
Hay un sentimiento extraño e irracional de sacarte la mascara, es porque el amor es tu verdadera naturaleza y la personalidad es tu naturaleza falsa.
Un hombre puede imaginar cosas que son falsas, pero solo puede entender cosas que son ciertas.
Sabía usted que en la actualidad mucha gente decide creer falsamente que Dios solamente se comunica con personas especiales o con personas elegidas y santas.
El estudio intelectual continuo da como resultado la vanidad y la falsa satisfacción de un conocimiento no digerido.
Sabía usted que estos estados alterados de conciencia dispersan nuestra atención, nos sedan, nos tranquilizan falsamente, nos provocan alucinaciones y paranoias.
Las religiones son igualmente falsas e igualmente verdaderas, depende como se les utilice. Se les puede utilizar al servicio del ego o al servicio de la verdad.
Tus preguntas son falsas si ya conoces las respuestas.
Sabía usted que la idolatría no está limitada a conceptos religiosos, también puede referirse a fenómenos sociales en donde ser crean y adoran falsas percepciones.
La ignorancia vino por el oído y se disipa por el oído. Por las palabras te has atado y por las palabras puedes ser libre. Las palabras son falsas, pero su significado es verdadero. La ilusión es necesaria para ir mas allá.
Las falsas creencias también exigen sanación.
Sabía usted que un desorden de personalidad múltiple se la llama al tipo de personalidad que se encuentra totalmente trastornada y corrompida por varios conjuntos de creencias falsas.
Solo hay una procedencia de infelicidad: las falsas creencias que tienes en tu cabeza, creencias tan extendidas que no se te ocurren cuestionar.
Sabía usted que en conjunto, toda religión que enseña doctrinas como las que enseñaba la antigua Babilonia, son parte hoy en día de ese imperio mundial de las religiones falsas.
Mas profundo aun; si tu y yo mentimos, el cerebro trabajara doble, trayendo como consecuencia que las palabras dichas, el cerebro las procese como imágenes falsas, creando una realidad distinta o irreal.
La religión reprime todo, en algunos casos es falsa.
Sabía usted que la predisposición mental es adquirida en el transcurso de nuestra vida, esto va sucediendo cuando nosotros vamos adoptando sistemas erróneos y falsas creencias.
Si mantienes a raya las conclusiones falsas, la verdad surgirá.
El maestro es la ilusión mas grande porque todo lo que dice con pleno oído y franqueza es falso. Pero las palabras falsas que el maestro te dice pueden hacerte llegar a la Realidad.
El ego es como el hijo de una mujer estéril: no existe. Es una falsa proyección de una mente confusa e ignorante.
Sabía usted que la influencia del mal puede guiar a la incredulidad y a falsas religiones, ya que uno de los grandes triunfos del mal es hacernos creer que es de lo mas normal.
No estamos llamados a entrar en controversia con los que sostienen las teorías falsas. La controversia no es rentable. Cristo no entro en ella. Esta escrito es el arma utilizada por el Redentor del mundo. Tengamos siempre cerca de la Palabra de Dios.
Trabajamos para poder consumir, y consumimos para buscar una falsa sensación de seguridad.
El complejo de culpa es un falso concepto del principio vital ni nos castiga, ni nos juzga. Usted se castiga o juzga a si mismo por sus falsas creencias, pensamientos negativos o auto condenación.
El ego nos lleva a la desdicha, nos ilusiona con promesas que terminan por defraudarnos, distorsiona la realidad y nos hace identificar con creencias falsas.
Podemos ver en el esquema que hay una clase de humanos que son creyentes fijos desde que nacen hasta que mueren. Estos no se atreven a cuestionar su ideología religiosa. Unos por el temor de castigo engendrado por la misma religión, otros por la soberbia y la FALSA CERTEZA de creer que su religión es dueña de la verdad.
Sabía usted que la mayoría de personas creen falsamente que para lograr los sueños se requiere de bastante esfuerzo para conseguirlo y les será algo supremamente difícil.
Es capaz de reflejar impecablemente el corazón y su perfección. Mientras que la mente dividida del ego y su pensar compulsivo crea ondas y ruido sobre la superficie del ser. Es como un espejo de feria que refleja imágenes falsas y distorsionadas.
Debes renunciar a tu falsa creencia de que las personas pueden pecar conscientemente. Nadie puede pecar a conciencia.
Lo que los hombres llaman conocimiento, es la aceptación razonada de las apariencias falsas. La sabiduría mira detrás del velo y ve.
Dentro de nosotros tenemos una barrera que impide o frena nuestros sentimientos, es el ego, una falsa idea de nosotros mismos, un yo falso, no somos eso, pero nos identificamos con el y creemos que lo que el siente, somos nosotros.
A fuerza de hablar de la desigualdad de ingresos y riqueza, a menudo nos olvidamos de subrayar el hecho empírico de su acelerado crecimiento, de exponer sus causas y orígenes, de ponderar sus consecuencias y, más aún, de refutar las falsarias justificaciones ideológicas ofrecidas por los habituales peritos en legitimación.
Sabía usted que dentro de ese colosal engaño que prostituye, son pocas las personas que observan la terrible corrupción del mundo entregado a falsas ilusiones y a la perdición.
La palabras verdaderas no son bonitas, las palabras falsas son bellas. Las buenas palabras no son persuasivas, las palabras que no son buenas son persuasivas.
Todas las generalizaciones son falsas, incluida esta.
Ninguna opinión, verdadera o falsa, pero contraria a la dominante y general, se ha abierto paso en el mundo instantáneamente y por la virtud de una demostración luminosa y tangible, sino a fuerza de repeticiones y, por ende, de costumbre.
La fe para el Nazareno era algo muy rico y trascendente. La fe autentica no convierte una vida falsa, por ejemplo, la aquejada por un dolor y sufrimientos imposibles en muerte, sino que convierte la vida en vida verdadera tanto que desaparece la muerte.
Estoy consagrado a la verdad porque ahuyente lejos de mi todas las falsas apariencias.
Sabía usted que aplicando el conocimiento espiritual podremos reducir el apego a las cosas externas y así eliminar las barreras que nos hemos autogenerado falsamente.
Es una cosa bastante repugnante el éxito. Su falsa semejanza con el merito engaña a los hombres.
La verdad no necesita argumento, acuerdo, teorías o creencias. Solo hay una prueba para eso y es preguntarse a si mismo:¿Es la afirmación verdadera o falsa en mi experiencia?
Sabía usted que quien quiera despertar su conciencia y tener conocimiento del gran reino espiritual existente, primero debe cuestionar y desprogramar todas aquellas falsas creencias.
Lo único que la mente puede hacer. Es descubrir lo irreal como irreal. El problema es solo mental. Abandona las falsas ideas. Eso es todo. No hay necesidad de ideas verdaderas. No hay ninguna que lo sea.
La mas falsa de las mentiras es precisamente la que se sirve de verdad para la satisfacción y justificación de sus vicios.
Un hombre puede imaginar cosas que son falsas, pero solo puede entender cosas que son verdad.
Sabía usted que cuando somos controlados por el ego, aceptamos creencias falsas de quienes debemos ser, por opiniones de otros y no por convicción propia.
Pese a estas razones, no faltan las justificaciones de la desigualdad. La primera de ellas viene a decir que la gente tiene lo que se merece. Así como el rico merece su riqueza, premio a su emprendedor dinamismo, el pobre -por su falta de aptitud y esfuerzo- merece su opuesto destino social. Así como el leal y eficiente trabajador merece conservar su empleo, así el que lo pierde merece el escarmiento del paro, en el que merecerá quedarse si no muestra suficiente capacidad y buena disposición para la búsqueda activa de otro empleo. Oportunidades no faltan, solo hay que saberlas buscar. Esta justificación meritocrática de la desigualdad es tan demagógicamente falsa como cierto es el hecho de que nadie merece moralmente ni su azar genético ni su azar social, de por sí muy desigualmente distribuidos. Nadie merece moralmente la familia que le ha tocado en suerte, rica o pobre, decente o depravada, ni, por tanto, las oportunidades -favorables o no- que la familia pueda brindarle. Y lo mismo cabe decir de los talentos -pocos o muchos- con los que uno viene al mundo: nadie los merece moralmente.
No dejes que falsas metas de la vida (dinero, poder, placer, estudio) los conviertan en esclavos y los hagan perder el autentico sentido de la vida.