LA ILUMINACIÓN ESPIRITUAL
CUENTO DE HOY
El indagador se acercó respetuosamente al discípulo y le preguntó:
¿Cuál es el sentido de la vida humana?
El discípulo consultó las palabras escritas de su maestro y, lleno de confianza, respondió con las palabras del propio maestro:
La vida humana no es sino la expresión de la exuberancia de Dios.
Cuando el indagador se encontró con el maestro en persona, le hizo la misma pregunta; y el maestro le dijo:
No lo sé.
El indagador dice:
No lo sé. Lo cual exige honradez.
El maestro dice:
No lo sé. Lo cual exige tener una mente mística capaz de saberlo todo a través del no-saber.
El discípulo dice:
Yo lo sé. Lo cual requiere ignorancia, disfrazada de conocimiento prestado.