Citas de Friedrich Nietzsche - Personajes
La filosofía de Nietzsche se halla atravesada esencialmente por la herencia de la cosmología clásica, en particular por los conceptos griegos.
JBN LIE
Mi amigo Nietzsche
La filosofía de Nietzsche se halla atravesada esencialmente por la herencia de la cosmología clásica, en particular por los conceptos de la cosmogonía griega. Esto es, la identificación del carácter más humano del hombre en relación con el vínculo que guarda con sus dioses. Hablamos de la dualidad de lo apolíneo contra lo dionisíaco. Nietzsche, aunque no descarta por completo la regencia de lo apolíneo en la vida como ha sido heredada, particularmente desde la modernidad, se inclina por resaltar y adoptar una postura en esta línea de lo dionisíaco. En ello consiste precisamente su crítica a la sociedad contemporánea y éste será el hilo conductor que permea de forma constante su obra y su vida.
Citas
- Siempre estoy a la altura del azar; para ser dueño de mí tengo que estar desprevenido.
- ¿Alguna vez han visto una niña tan bonita como el más desamparado de los gatos del arrabal?.
- ¡Amad al prójimo como a vosotros mismos- pero antes debéis ser hombres que se amen a sí mismos.
- Bendito sea el que olvida, porque a él pertenece el paraíso.
- Bienaventurados sean los olvidadizos ya que vuelven a tropezar con la misma piedra.
- Cuando hay paz, el hombre guerrero se ataca a si mismo.
- Cuando se tienen muchas cosas que meter en él, el día tiene cien bolsillos.
- Cuantos hombres se precipitan hacia la luz, no para ver mejor sino para brillar.
- Hablando francamente, es preciso que nos encolericemos alguna vez para que las cosas marchen bien.
- De nadie estamos más lejos que de nosotros mismos.
- Diez veces por día debes reír y regocijarte; de lo contrario te molesta de noche el estómago, el padre de la gran aflicción.
- Dios ha muerto, viva el hombre, que lo ha matado.
- El amor y el odio no son ciegos, sino que están cegados por el fuego que llevan dentro.
- El cristianismo dio de beber veneno a Eros: este, ciertamente, no murió, pero degeneró convirtiéndose en un vicio.
- El gran estilo nace cuando lo bello obtiene la victoria sobre lo enorme.
- El Hombre, en su orgullo, creó a Dios a su imagen y semejanza.
- El hombre sufre tan terriblemente en el mundo que se ha visto obligado a inventar la risa.
- El que niega su propia vanidad suele poseerla en forma tan brutal, que debe cerrar los ojos si no quiere despreciarse a sí mismo.
- El que no pueda bendecir, que aprenda a maldecir.
- El remordimiento es como la mordedura de un perro en una piedra: una tontería.
- El sexo es una trampa de la naturaleza para no extinguirse.
- En el dolor hay tanta sabiduría como en el placer: ambas son las dos grandes fuerzas conservadoras de la especie.
- Es necesario llevar en sí mismo un caos, para poner en el mundo una estrella danzante.
- Es preferible morir a odiar y temer: es preferible morir dos veces a hacerse odiar y temer.
- Fe significa no querer saber la verdad.
- Haber hecho algo inmortal puede llevar a la perdición.
- Hay espíritus que enturbian sus aguas para hacerlas parecer profundas.
- Hay que volver a la muchedumbre, su contacto endurece y pule, la soledad ablanda y pudre.
- La buena memoria es a veces un obstáculo al buen pensamiento.
- La crueldad es uno de los placeres más antiguos de la humanidad.
- La decisión cristiana de considerar que el mundo es feo y malo ha hecho al mundo feo y malo.
- La guerra vuelve estúpido al vencedor y rencoroso al vencido.
- La irracionalidad de una cosa no es un argumento en contra de su existencia, sino más bien una condición de la misma.
- La manera más desagradable de replicar en una polémica es la de enojarse y la de callar, pues el agresor interpreta ordinariamente el silencio como un desprecio.
- La mentira más común es aquella con la que un hombre se engaña a sí mismo. Engañar a los demás es un defecto relativamente vano.
- La mujer comprende al niño mejor que el hombre, pero el hombre es más niño que la mujer.
- La risa es un ser malicioso, pero de conciencia tranquila.
- La única diferencia entre Dios y yo es que yo existo.
- La ventaja de tener mala memoria es que se goza muchas veces de las mismas cosas.
- La verdad es que amamos la vida, no porque estemos acostumbrados a ella, sino porque estamos acostumbrados al amor.
- La vida es un instinto de desarrollo, de supervivencia, de acumulación de fuerzas, de poder.
- Lo absurdo de una cosa no prueba nada contra su existencia, es más bien condición de ella.
- Las personas que brindan su plena confianza creen por ello tener derecho a la nuestra. Es un error de razonamiento: los dones no dan derecho.
- Librar todas las cosas de la servidumbre de un fin. En las cosas encuentro yo esta seguridad bienaventurada: que todas bailan con pies de azar.
- Lo que me entristece no es que me hayas mentido, sino que ya nunca más podré confiar en ti. Fuente: Más allá del bien y del mal.
- Los monos son demasiado buenos para que el hombre pueda descender de ellos.
- Nada es más necesario que la verdad y, con relación a ella, todo lo demás no tiene más que un valor de segundo orden.
- Nadie puede construirse el puente sobre el cual hayas de pasar el río de la vida; nadie, a no ser tú.
- No hay razón para buscar el sufrimiento, pero si éste llega y trata de meterse en tu vida, no temas; míralo a la cara y con la frente bien levantada.
- No es la fuerza de los nobles pensamientos sino su duración lo que hace superiores a los hombres.
- ¿No es la vida cien veces demasiado breve para aburrirnos?
- No querer mortificar, no querer herir a nadie, puede ser lo mismo una muestra de justicia como de timidez.
- No puedo creer en un Dios que quiera ser alabado todo el tiempo.
- Olvida uno su falta después de haberla confesado a otro, pero normalmente el otro no la olvida.
- Para muchos, lo abstracto es fuente de fastidio; para mi, en los buenos días, una intoxicación y una fiesta.
- ¡Preferible vivir en medio del hielo que entre virtudes modernas y otros vientos del sur!
- Quien siembra en el espíritu planta un árbol a larga fecha.
- Quien tiene algo por qué vivir, es capaz de enfrentar todos los comos.
- Quien ve mal siempre ve demasiado poco; pero quien oye mal siempre oye demasiado.
- Se debe morir orgullosamente cuando ya no es posible vivir con orgullo.
- Si solo se dieran limosnas por piedad, todos los mendigos hubieran muerto de hambre.
- Sin música la vida sería un error.
- Solo la música enferma hace dinero hoy.
- Solamente aquel que construye el futuro tiene derecho a juzgar el pasado.
- Solo comprendemos aquellas preguntas que podemos responder.
- Todo el que disfruta cree que lo que importa del árbol es el fruto, cuando en realidad es la semilla. He aquí la diferencia entre los que creen y los que disfrutan.
- Todo hábito hace nuestra mano más ingeniosa y nuestro genio más torpe.
- Todo idealismo frente a la necesidad es un engaño.
- Un filósofo casado es un personaje de comedia. Fuente: Citado en Brennot, Philippe,El genio y la locura[4]).
- ¿Es el nihilismo una idea? ¿Es una condición cultural? ¿Un estado de ánimo? ¿Un conjunto de fenómenos que emergen y que antes, muy poco antes eran inexistentes?
- Yo no soy un hombre, soy un campo de batalla.
- Ver a la chusma y golpearla es todo uno.
- El filósofo debe saber lo que necesita; y el artista debe hacerlo.
- El error (la fe en el ideal) no es ceguera, el error es cobardía... Todo logro, todo paso hacia adelante en el conocimiento, se sigue de la valentía, de la dureza contra uno mismo, de la limpieza en relación con uno mismo... Nitimur in vetitum [luchamos por lo prohibido].
- Yo no sé qué hacer; yo soy todo eso que no sabe qué hacer.
- Amor es el sentimiento de la propiedad o de aquello que nosotros queremos convenir en propiedad nuestra. (Tratados filosóficos).
- Creo que los animales ven en el hombre un ser igual a ellos que ha perdido de forma extraordinariamente peligrosa el sano intelecto animal, es decir, que ven en él al animal irracional, al animal que ríe, al animal que llora, al animal infeliz.
- Cuando trates con una mujer, nunca olvides el látigo.