LA ILUMINACIÓN ESPIRITUAL
El cuento zen funciona como una espada que corta el nudo de la mente. ¡Disfrútalos!
Hogen, un maestro zen chino, vivía solo en una ermita en el campo.
Un día, cuatro monjes viajeros que pasaban por allí le pidieron permiso para encender un fuego en su patio y calentarse un poco. Mientras estaban preparando la hoguera, Hogen los oyó hablar de la objetividad y la subjetividad.
Uniéndose a la discusión, dijo:
Ahí tenéis esa gran piedra.
¿Dónde consideráis que está, dentro o fuera de vuestra mente?
Uno de los monjes replicó:
Desde el punto de vista budista, todas las cosas son objetivaciones de la mente.
Por lo tanto yo diría que la piedra está dentro de mi cabeza.
Hogen replicó:
¡Debes tener la cabeza muy pesada si llevas en tu mente una piedra tan grande como esa!
MORALEJA
Quien se dispone a abandonar su objetividad y su capacidad de juicio debe vivir con lo ininteligible. Quien aprende a evaluar lo que le sucede con realismo y objetividad lo hace más fuerte y tranquilo.
Debemos reconocer que cualquier cosa que diga el hombre tiene que ser humana. Aun una verdad objetiva tiene que estar teñida por la persona que la firma. Aun la objetividad no puede estar sin lo subjetivo; lo subjetivo va y la cubre.
CUENTOS ZEN CON MORALEJAS
CUENTOS NARRADOS EN AZUL
LINK RELACIONADOS
MUCHAS GRACIAS
ADVERTENCIA A LOS LECTORES