MENTE NEGATIVA (CUENTO)

CUENTO ZEN (203)

La mente positiva es un enfoque positivo respecto a Dios, un llegar a Dios, una búsqueda, una indagación. La mente negativa es un esperar a Dios, no una búsqueda. La mente negativa consiste en conformarse con lo superficial, no en ir a buscar, no en indagar, solo en ser receptivo que solo obedece a programaciones.

Considera pues al hombre, no como uno, porque en este universo relativo nada puede existir como uno. Todo existe a través de la dualidad. Estás dividido en dos. Posees una parte positiva y una parte negativa.

Un grupo de discípulos le preguntó una vez a su maestro:

¿De dónde viene el lado negativo de nuestra mente?

El maestro se retiró un momento y enseguida regresó con un gigante lienzo en blanco. En medio del lienzo había un pequeño punto negro.

¿Qué ven en este lienzo, Preguntó el maestro.

Un pequeño punto negro, Respondieron los discípulos.

El maestro dijo:

Ese es el origen de la mente negativa. Ninguno de ustedes ve la enorme extensión blanca que lo rodea, una mente negativa definitivamente nunca podrá ver a Dios en plenitud.

MORALEJA

Sí, de eso es de lo que trata la meditación, de la ausencia de actividad mental. La mente deja de pensar; la mente está silente. No hay rastro de actividad mental, es pura conciencia en la tranquilidad de la ausencia de todo. Los japoneses tienen una hermosa palabra para ello: lo llaman kokoro. Significa nada absoluta, una ausencia tremenda, vaciedad, pero no negativa. La ausencia de todo parece significar algo que es negado. Pero no. Todo lo que es basura es negado, es cierto, obviamente, pero una vez que niegas todo lo que es basura, se afirma tu naturaleza más íntima. Es muy positivo.

La gente tiende a residir más en las cosas negativas que en las positivas. Por tanto, la mente se obsesiona con las cosas negativas, con juicios, culpa y ansiedad producida por pensamientos sobre el futuro.

Si la respuesta de tu mente es afirmativa, nada debe inquietarse. Y si es negativa, eres tú quien debe aplicar el remedio. Sin embargo dar atención positiva o negativa a algo es una forma de dar energía y la forma dañina de estas energías es retener la atención de la una o en la otra. Por lo tanto, si vas a retener alguna de las energías, que al menos sea la positiva y si no vas a retener, pronto estarás fluyendo y dejando fluir la energía y serás libre.

Ya eres lo que debes ser, y tu negativa a creerlo, es la única razón por la que no lo ves.

Vive en armonía contigo mismo y con el entorno; vive en el presente, en lugar de estar buscando, o estar inmerso en emociones negativas. Más bien, trate de no observar realidades negativas, y concéntrese en ver lo que realmente puede hacerte bien, todo lo que puede ayudarte a vibrar de modo más elevado.


DEFINICIONES DEL ZEN


El zen es una tradición ancestral que nació en la India y se expandió por China y Japón. Su propósito es lograr la iluminación, el estado de completa sintonía con la realidad tal cual es.

El zen no se basa en escrituras sagradas, rituales o ceremonias, sino en la meditación, el silencio y la conciencia plena.

El zen no busca dar soluciones, sino generar preguntas, cuestionar las creencias y los prejuicios, liberar la mente de las ataduras del ego y las ilusiones.

El zen utiliza las historias como un recurso para transmitir su esencia, pero no son historias ordinarias, sino historias que violan las reglas, que desafían la lógica, que asombran y desconciertan. Son historias que apuntan a lo esencial, lo que no se puede expresar ni pensar.

Las historias zen no son para entenderlas, sino para vivirlas, para dejarse impresionar por ellas, para despertar con ellas. Las historias zen son como dedos que indican la luna, pero no son la luna.

El maestro zen cuenta las historias con elegancia y humor, sin querer imponer nada, sino solo compartir su visión. El discípulo zen escucha las historias con interés y apertura, sin intentar analizarlas o juzgarlas, sino solo dejarse llevar por ellas.

Las historias zen son como semillas que se plantan en el corazón del oyente, y que pueden germinar en cualquier momento, dando frutos de sabiduría y compasión.

Las historias zen son un obsequio, una invitación a la aventura, una puerta abierta a lo desconocido.

En este blog te presentamos algunas de las historias zen más famosas y fascinantes, acompañadas de comentarios y reflexiones que te ayudarán a profundizar en su significado. Te invitamos a leerlas con calma y curiosidad, sin prisas ni expectativas, solo con la disposición a sorprenderte y aprender.

Esperamos que estas historias te inspiren y te acompañen en tu camino hacia la iluminación.