El pensamiento y la acción son carceleros del destino, ellos apresan, si son bajos. Ellos son también ángeles de Libertad, nos liberan, si son nobles.
El sufrimiento cesa para quien es puro. No hay sentido en quemar el oro después que la escoria se ha retirado, y un ser perfectamente puro e iluminado no puede sufrir.
JAMES ALLEN