La ataraxia no resume la felicidad total, sólo constituye la condición indispensable, es imposible ser feliz si se sufre en la carne o en el espíritu.
La paz del alma como bien supremo, merece cualquier sacrificio, deben evitarse de este modo todas las cargas que perjudicarían a la ataraxia.
EPICURO
FELICIDAD EL ESTADO IDEAL DE ATARAXIA