La iluminación espiritual

Frases Leon Tolstoi

Citas Leon Tolstoi


A menudo pienso que los hombres no entienden lo que es noble y lo que es ignorancia.

Habrá hoy, habrá mañana, siempre habrá, y hubo ayer, y hay un día antes.

La felicidad es una alegoría, la infelicidad una historia.

Debido a la confianza en si mismo con la que había hablado, nadie podía decir si lo que dijo era muy inteligente o muy estúpido.

La verdadera comunicación se da cuando las partes no tienen miedo.

Cualquiera que sea nuestro destino o lo que sea, lo hemos logrado y no podemos quejamos.

El respeto se invento para cubrir el lugar vacío donde el amor debería estar.

El AMOR futuro no existe. El amor es una actividad que habita solo en el presente. El hombre que no manifiesta AMOR en el presente, no tiene amor que dar.

La verdad no hace tanto bien en el mundo como el daño que hacen sus apariencias.

Así como el animal en cautividad recorre a diario la jaula para desentumecer sus patas o mide la longitud de su cadena, así mido yo la longitud de la mía, remontándome hasta la muerte, para desentumecer mis miembros, y hacer mas llevadera la vida.

En mi he encontrado a la persona mas interesante entre mis conocidos.

El matrimonio es una barca que lleva a dos personas por un mar tormentoso; si uno de los dos hace algún movimiento brusco, la barca se hunde.

Los dos guerreros mas poderosos son la paciencia y el tiempo.

Es toda la voluntad de Dios: puedes morir mientras duermes, y Dios puede perdonarte en la batalla.

La pureza del corazón consiste en desear una cosa.

Las mejores historias no vienen de bueno contra malo, sino de bueno contra bueno.

¿Estoy loco, para ver lo que otros no ven, o están locos los responsables de todo lo que estoy viendo?

Todos piensan en cambiar el mundo, pero nadie piensa en cambiarse a si mismo.

La música es el placer que el alma experimenta contando sin darse cuenta de que cuenta.

Mientras haya mataderos siempre habrá campos de batalla.

El Reino de Dios esta dentro de ti.

Uno debe ser astuto y malvado en este mundo.

El secreto de la felicidad no esta en hacer siempre lo que se quiere, sino en querer siempre lo que se hace.

Bajo tratando de no mirarla largamente, como si ella fuera el sol, pero la vio, como uno ve el sol, sin mirar.

Todo depende de la educación.

Determinar un defecto del carácter supone medio éxito para combatirlo.

No tienen idea de lo que es la felicidad, no saben que sin este amor no hay felicidad o infelicidad para nosotros, no hay vida.

La vida conyugal es una barca que lleva dos personas por un mar tormentoso. Si uno de los dos hace algún movimiento brusco, la barca se hunde.

A veces no sabia lo que temía.

Si quieres ser feliz, se.

La verdadera vida se vive cuando ocurren pequeños cambios.

El único conocimiento absoluto que puede alcanzar el hombre, es que la vida no tiene sentido.

Nada es tan necesario para un hombre joven como la compañía de mujeres inteligentes.

La oración no cambia a Dios, pero si cambia a quien ora.

Ama a los que te odian.

Cualquier cosa es mejor que las mentiras y el engaño.

Cada mentira es un veneno; no hay mentiras inofensivas Solo la verdad es segura. Solo la verdad me da consuelo: es el único diamante irrompible.

El gobierno es una asociación de hombres que ejercen violencia sobre todos los demás.

Las felicidades se parecen cada desgracia tiene una fisonomía especial.

Mente sana en cuerpo sano.

Aquí estoy vivo, y no es mi culpa, así que tengo que intentar salir adelante lo mejor que pueda sin herir a nadie hasta que la muerte se haga cargo.

Es mucho mejor hacer el bien de una manera que nadie sepa nada al respecto.

Creo que es cierto que hay tantas mentes como cabezas, hay tantos tipos de amor como corazones.

¿Es realmente posible decirle a otra persona lo que uno siente?

Me dio una inmensa alegría que no me hayan concedido el Premio Nobel. En primer lugar, esto me libro de un gran aprieto, el de disponer de ese dinero que, como el dinero en general, según mis convicciones, no puede producir sino mal.

La angustia es el vértigo de la libertad.

Hay algo en el espíritu humano que sobrevivirá y prevalecerá, hay una pequeña y brillante luz ardiendo en el corazón del hombre que no se apagara sin importar cuan oscuro se vuelva el mundo.

Un hombre es como una fracción cuyo numerador es lo que es, y cuyo denominador es lo que piensa de si mismo. Cuanto mayor sea el denominador, menor será la fracción.

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