La iluminación espiritual
Bienaventurados los corazones flexibles, porque no se romperán.
La belleza, para ser agradable, debe ser ignorada.
Si os halláis precisado a oponeros al dictamen de otro, hacedlo.
Ten paciencia con todas las cosas, pero sobre todo contigo mismo.
Lo que se hace con precipitación nunca se hace bien; obrad siempre con tranquilidad y calma.
Es una especie de obediencia muy agradable a los ojos de Dios no desear dispensas sin mucha necesidad.
La ciencia que sirve para hacernos orgullosos y que degenera en pedantería no vale mas que para deshonrarnos.
Se aprende a hablar, hablando. A estudiar, estudiando. A trabajar, trabajando. De igual forma se aprende a amar, amando.