He caminado tras muchos sueños, de los cuales ninguno se ha hecho realidad.
Qué bien conocemos el estereotipo de los rudos indios de las llanuras: matador de búfalos, vestido con una decorada piel de ante, elaboradas plumas.
El indígena a diferencia de nosotros es que nunca perdió el contacto con la naturaleza, estos seres que creíamos que eran salvajes están enseñandonos.
Levántate con el sol para orar. Ora solo. Ora frecuentemente. El Gran Espíritu oirá, ciertamente, si le hablas. Sé tolerante con aquellos que amas.
Levántate con el sol para orar. Ora solo. Ora frecuentemente. El Gran Espíritu oirá, ciertamente, si le hablas. Ella escuchara tu oración sagrada.
Mira después el bienestar del cuerpo y la mente. Ejercita el cuerpo para fortalecer la mente. Crece mucho espiritualmente para curar enfermedades.
Habla la verdad pero solo para el bien de otros. Sé verdadero ante ti mismo primero que todo. No puedes nutrir y ayudar a otros si no puedes nutrirte.
Abre tu corazón y alma a él Gran espíritu. La naturaleza no es para nosotros. Es parte de nosotros. Ella es parte de tu familia del mundo, amala.
Honra todas tus relaciones. Honra los pensamientos deseos y palabras de todas las personas. Permite a cada persona el derecho a su expresión personal.
Haz lo que se necesite hacer para el bien de todos. No hables mal. La energía negativa que pones en el universo se multiplicará cuando retorne a ti.
La tierra es nuestra madre; cuida de ella. Respeta todas las cosas que están sobre esta tierra, sean personas, animales o plantas. Ella nos creó.
Toda vida es sagrada; trata a todos los seres con respeto. Respeta todas las cosas que están sobre esta tierra, sean personas, animales o plantas.
Toma de la Tierra lo que es necesario y nada más. No tomes lo que no es tuyo, sea de una persona, una comunidad, de la selva o de una cultura.
Los proverbios indios norteamericanos son muy especiales. Su significado nos traslada a un magnífico equilibrio entre concordia, fortaleza y dignidad.
Haz lo que se necesite hacer para el bien de todos. Trata a los huéspedes en tu casa con mucha consideración. Dales y trátalos con respeto y honor.
Búscate a ti mismo, por tus propios medios. No permitas que otros hagan tu camino por ti. Es tu senda, y sólo tuya. Nadie puede hacer tu camino.
Sé tolerante con aquellos que han perdido el camino. La ignorancia, la presunción, la ira, los celos y la avaricia, provienen de un alma perdida.