Citas Zen
La experiencia Zen, de la iluminación o de Sartori, trasciende toda categoría de pensamiento, no se interesa en ninguna abstracción ni conceptualización.
No pensar sobre nada es Zen. Una vez sabes esto, caminar, sentarse o tumbarse, todo lo que haces es Zen.
El movimiento y la quietud son dos estados. El maestro Zen, que no depende de nada, utiliza a su antojo tanto el movimiento como la quietud.
He vivido con muchos maestros Zen, muchos de ellos eran gatos.
Si quieres viajar por el camino de los Budas y los maestros zen, entonces no esperes nada, no busques nada, y no comprendas nada.
En el budismo Zen la alimentación se concibe como káiser termino que hace referencia a la forma de conseguir la armonía la naturaleza y la moderación.
He vivido con varios maestros Zen todos ellos gatos.
Cuando realmente entiendes zen… se puede utilizar cualquier libro. Se puede utilizar la Biblia. Se puede utilizar Alicia en el país de las maravillas o el diccionario porque… el sonido de la lluvia no necesita traducción.
El Zen es inaprensible, puede dar vida a la gente, pero también puede arrebatársela.
La comprensión del Zen para la iluminación no son practicas que debes seguir. Es el punto de partida para experimentar continuamente el aquí y el ahora.
No trate de evaluar el Zen con su espíritu ni expresarlo con palabras.
El secreto del Zen son solo dos palabras: no, siempre. Así que.
La calma que proviene del estar sentado, lo alienta a uno en la vida cotidiana. Así, pues, es como uno halla el valor que tiene el Zen en la vida cotidiana, y no solo cuando se esta sentado.
El Zen aspira a concentrar la atención sobre la realidad misma, en lugar de hacerlo sobre nuestras reacciones intelectuales y emociónales ante la realidad.
El zen es la base para alcanzar la Iluminación y ejercer la maestría.
No pensar en nada es Zen. Una vez que sabes esto, caminar, sentarse o tumbarse… todo lo que haces es Zen.
La vida de un maestro zen es una continua equivocación.
El Zen no es un poco de fantasía, un arte especial de vivir. Nuestra enseñanza es solo vivir, siempre en la realidad, en su sentido exacto. Hacer nuestro esfuerzo, momento tras momento, es nuestro camino.
La verdad del Zen es la verdad de la vida, y la vida significa vivir, moverse, actuar, no simplemente reflejar.
El Zen no tiene doctrina o filosofía especial, ni credo o dogma formal y enfatiza su libertad de pensamiento, esto la hace verdaderamente espiritual.
El Zen permite que la actitud del espíritu fluya naturalmente en una profunda concentración, la conciencia mas allá de todas las categorías.
La practica del zen es olvidarse del yo en el acto de unirse con algo.
El Zen no es una filosofía, no es una psicología, no es una doctrina.
El Zen es la única religión del mundo que enseña la iluminación repentina. Dice que la iluminación no lleva tiempo; puede ocurrir en un momento.
El zen no confunde la espiritualidad con pensar sobre Dios mientras uno pela patatas. La espiritualidad zen es simplemente pelar patatas.
El futuro de la humanidad se moverá mas cerca del enfoque Zen, porque el encuentro de oriente y occidente es posible a través de algo como el Zen, lo cual es terrenal y sin embargo no terrenal.
El verdadero Zen, en tanto que representante de la universalidad de la conciencia y de la practica de la meditación en la postura perfecta del casen, esta abierto a todo.
Este es el enfoque del Zen: nada tiene que ser hecho. No hay nada que hacer. Uno solo tiene que ser. Tomate un descanso, se normal y se natural.
El Zen significa el esfuerzo del hombre practicando la meditación, el casen. Esfuerzo para alcanzar el dominio de los pensamientos sin discriminación, la conciencia mas allá de todas las categorías, englobando todas las expresiones del lenguaje.
El Zen es una forma de desaprender. Te enseña como tirar lo que has aprendido, como volverte poco habilidoso de nuevo, como ser de nuevo un niño, como comenzar a existir sin mente de nuevo, como estar aquí sin ninguna mente.
El Zen incluye todo. Nunca niega, nunca dice no a nada; acepta todo y lo transforma en una realidad mas alta.
¿Que es el verdadero casen? ¿Que quieres decir con que el Zen se convierte en Zen y tu te conviertes en ti? Convertirte en ti es un punto muy importante. Te conviertes en ti.
Para los estudiantes Zen una hierba es un tesoro. Con esa actitud, lo que haces, la vida se convierte en un arte.
He vivido con varios maestros Zen; todos ellos gatos.
La esencia del Zen no se expresa con palabras.
El Zen no es una especie de excitación, sino concentración en nuestra rutina diaria habitual.
Si crees que la enseñanza del Zen es incomprensible, estarías ciego si te mantuvieras toda tu vida en una actitud tan contraria a la evidencia.
Si quieres estudiar Zen, debes olvidar todas tus ideas anteriores y practicar Casen y ver que tipo de experiencia tienes en tu practica. Eso es natural.
En palabras de un poema Zen, al anochecer, el gallo anuncia el amanecer. A medianoche, el sol brillante.
En el zen, como en las artes marciales, el entrenamiento cuenta mucho. ¿Cuanto tiempo hay que entrenarse? Muchas gentes me han preguntado: ¿Durante cuantos años tengo que hacer casen? Yo respondo: hasta la muerte.
El secreto del Soto Zen son solo dos palabras: no siempre así. En japonés, son dos palabras en ingles. Ese es el secreto de nuestra practica.
Todos los otros caminos trepan lentamente por las laderas de la montaña, pero el Zen, al igual que un camino romano, arroja a los lados todos los obstáculos y se mueve en línea recta hacia la meta.