Frases de Herida
Frases sobre «Herida»
Dentro de nosotros existen zonas sanas y también zonas heridas, éstas pueden ser conscientes, pero en muchas ocasiones ellas permanecen en forma inconsciente.
Creo que el tiempo cicatriza todas las heridas.
Sabía usted que la gran bestia esta herida de muerte y que el próximo representante será el ultimo.
Hasta que no seas consciente de que tu mente esta llena de heridas y de veneno emocional, no limpiaras ni curaras las heridas y continuaras sufriendo.
Y celebrar que esta viva, explotando en libertad. Para sanar las heridas, con pura electricidad.
Para perdonar, debe haber habido una herida; y para ser herido, debe haber habido orgullo.
Tus manos, heridas de intrincados caminos, son la historia de una raza de amadores.
Amada mía, querida mía, Ay, Patria mide tumbo en tumbo, se pierde el rumbo de la alegría. Vamos arriba. Que no se diga que estas llorando; que tus heridas mal avenidas se irán curando.
Si saltas dentro de tu mente empezaran a aparecer los problemas. Observa lo que arrastra: dolores, heridas, deseos… Siéntate y espera hasta que se aclare.
Con la poderosa medicina del amor puedes curar viejas heridas, estar en paz, ser feliz y dar felicidad. animo, elige trabajar en ti mismo en cuatro espacios: el amor, la aceptación, el perdón y el desapego.
Desdramatizar el presente es importante para no exagerar los acontecimientos y no envenenar las relaciones de hoy. Efectivamente por causa de estas bolsas de sufrimiento uno ha exagerado la situación que, si uno la analiza, se da cuenta que tiene relación con lo que causó la herida.
El perdón no es siempre fácil. A veces, se siente mas dolorosa que la herida que sufrió, a perdonar al que infligió. Y, sin embargo, no hay paz sin perdón.
Si tus pies deslizan, habrá herida. Si tu lengua desliza, iras al infierno. Utiliza tu lengua con cuidado.
Hemos sido llamados para curar las heridas, para unir lo que se ha venido abajo y para llevar a casa a los que han perdido su camino.
Dicen que el tiempo cura las heridas, pero nadie ha vivido lo suficiente para probar dicha teoría.
En cada comunidad, hay trabajo por hacer. En cada nación, hay heridas que sanar. En cada corazón, esta el poder para hacerlo.
Comencemos una reingeniería desde el interior. Revisemos desde muy adentro aunque duela un poco el tener que hurgar, las heridas duelen al sanar.
Los castigos de la sociedad son pequeños en comparación con las heridas que le hacemos a nuestra alma cuando miramos hacia otro lado.
La desaparición de la necesidad de ser pequeño (a) es uno de los síntomas de la curación total, es decir, de la curación de la no-existencia y de la curación de todas las heridas periféricas.
Del mismo modo en que usamos la mano derecha para curar una herida en la mano izquierda deberíamos ver los problemas de los demás como si fueran nuestros y apresurarnos a ayudarles.