Citas Vivir
Sabía usted que la diferencia entre lo que hacemos y lo que somos capaces de hacer, es la diferencia entre ser una persona de promedio común y la de vivir de manera trascendente.
La física me indica como puedo vivir cómodamente en un mundo en el cual se desconocen el color y el sonido.
Imagino que se lo que significa vivir y morir como no violento. Pero me falta demostrarlo mediante un acto perfecto.
Ninguna cultura puede vivir si intenta ser excluyente.
Vivir en la inmensidad del estado natural es bañarse en el océano de placer y alegría no personal.
No es la búsqueda de estados mayores y mayores de felicidad y dicha lo que conduce a la iluminación, sino el anhelo de la realidad y la insatisfacción rabiosa con vivir algo menos que una vida plenamente autentica.
La espiritualidad no se trata de ir a la jungla. Se trata de vivir una vida plena. Quieres el pastel completo, no un corte.
Los científicos, meditando sobre los antiguos manuscritos, fósiles etc., son capaces de reconstruir escenas del pasado y hacerlas revivir Su mente subconsciente viene en su ayuda.
A partir de mañana empezare a vivir la mitad de mi vida; a partir de mañana empezare a morir la mitad de mi muerte.
Sabía usted que vivir desde el espíritu es observar todas las ilusiones los cuales hemos aceptado y despertar del sueño sufrido que hemos aceptado y creado.
Vivir en el mundo sin percatarse del significado del mismo es como deambular por una gran biblioteca sin tocar sus libros.
Sabía usted que así siendo conscientes de la existencia de los hábitos, desempeñaremos conscientemente en nuestro diario vivir las acciones correctas para nuestra meta eterna.
Sabía usted que es decir, la inteligencia espiritual nos da la capacidad de estar en armonía con la totalidad, generando sentido para vivir.
Sabía usted que vivir armónicamente es un reconocimiento a nuestra identidad trascendental, una perspectiva evolutiva de la consciencia que permite comprender nuestra verdadera esencia.
Dios me creo a mi —y a ti— para vivir con una sola pasión, omnipresente y transformadora, a saber, una pasión por glorificar a Dios disfrutando y mostrando su excelencia suprema en todas las esferas de la vida.
Vamos en ascenso vibración al hacia otro lugar o estado del Ser, y que pronto viviremos como se vive en El Cielo.
Vivir, respirar y ser felices bajo Su mirada.
Ningún trabajo o amor florecerá a partir de la culpa, el miedo o el vacío del corazón, así como ningún plan valido para el futuro puede ser hecho por aquellos que no tienen capacidad para vivir el ahora.
No puede uno crecer mas por haber subido mas alto, ni tampoco puede ser mas pequeño por vivir en un lugar mas bajo.
Debido a que todos compartimos este planeta Tierra, tenemos que aprender a vivir en armonía y en paz unos con los otros y con la naturaleza. Esto no es solo un sueño, sino una necesidad.
Simplemente vivir aquí sin metas es de lo que se trata un proceso espiritual. Eso no significa estar letárgico y relajado.
A menudo no nos damos cuenta de lo que estamos destinados a ser, porque estamos demasiado ocupados tratando de vivir las ideas de otras personas. Pero las otras personas y sus opiniones no tienen poder para definir nuestro destino.
Seré santo quiere decir: me despojare de todo cuanto no es Dios. Despojare mi corazón y lo vaciare de toda cosa creada; viviré en la pobreza y en el desprendimiento.
Sabía usted que estar conscientes espiritualmente nos permitirá actuar éticamente, vivir en armonía interna con los demás y con la naturaleza.
Educar no es dar carrera para vivir, sino templar el alma para las dificultades de la vida.
Al final de nuestras vidas descubrimos que la única condición para vivir es la muerte.
Vivir en estado de agradecimiento es vivir en el estado ideal de recepción.
La moderación es para los blandos, los arrepentidos, es para aquellos con miedo de reír o llorar, de vivir o morir. La moderación es propia del diablo.
A vivir se aprende toda la vida, y toda la vida se ha de aprender a morir.
Y así llegamos a un círculo completo, como respirar y respirar sin separación entre nuestra naturaleza absoluta y el vivir humano.
Solo cuando la eternidad toma el tiempo de la mano, solo cuando el infinito se casa con el pensamiento finito, el hombre puede liberarse de si mismo y vivir con Dios.
No paséis el tiempo soñando con el pasado y con el porvenir; estad listos para vivir el momento presente.
El gozo, la paz y el amor no son metas espirituales. Son el punto de partida para vivir con sensatez.
Al ser incapaces las personas de aceptar esta verdad, no entiende en absoluto la formula por la que pueden crear lo que quieren vivir en sus vidas.
Cuando todas las provincias del mundo estén tan repletas de habitantes que no puedan vivir donde están ni trasladarse a otro sitio, el mundo se purgara a si mismo.
Tienes miedo de morir, y tienes miedo de vivir. Que manera de existir.
El conocimiento favorece la emergencia del Yo Soy. La entrega a la Divinidad potencia la unidad en el Yo Soy. La acción desapropiada hace vivir en conexión con el Yo Soy. La compasión se muestra como expresión del Yo Soy.
La humanidad necesita para vivir mitos y mentiras. Si uno ve la verdad escueta se pega un tiro.
La lucha y desesperación por conseguir un empleo publico, buscado una forma de vivir sin trabajar, probara finalmente la fortaleza de nuestras instituciones.
Si aspiráramos en esta humanidad a consumir como un americano promedio, son imprescindibles tres planetas para poder vivir. – Arrasamos las selvas verdaderas e implantamos selvas anónimas de cemento.
Sabía usted que debemos recordar que intentar cambiar a la gente que nos rodea, por acciones que nos gustaría que ellos realizaran, es como intentar vivir su propia vida.
La vida no tiene respuesta. La vida tiene una sola cosa, un problema: vivir.
El arte de la vida es vivir el momento presente y hacer ese momento tan perfecto como sea posible, por la comprensión de que somos los instrumentos y la expresión de Dios mismo.
Solo la conciencia sabe perdonar y dejar ir, el perdón es no resistencia, es permitir a la vida vivir a través de usted.
Tienes que comprender que a nadie le sucede una experiencia que no le corresponda. Y si le corresponde la vivirá, aun cuando luche o se resista.
Sabía usted que vivir con intensidad es sentir que la vida te atraviesa a cada instante y que es parte de todo tu ser en cada encuentro, en cada evento, cada viaje y cada palabra.
Si Dios fuera condenado repentinamente a vivir la vida que ha infligido a los hombres, se mataría a Si mismo.
Hay que comer para vivir, y no vivir para comer.