La iluminación espiritual

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En los torneos importantes no hay que temer a la perdida de una partida, sino al decaimiento del animo que ello puede ocasionar.

El ajedrez es ciertamente un arte, pero yo no pensaba en ello. Solo el juego preciso y fuerte puede ser bonito. La precisión, en primer lugar. En última instancia, todo se decide por la clase. Luego podemos aspirar a una partida preciosa.

La cosa más difícil en ajedrez es ganar una partida ganada.

La partida más difícil de ganar es una partida ganada.

La mentira gana partidas, pero la verdad gana el juego.

Era un mercado de amor, unos cuantos dólares para saber el gusto del sabor de una cama compartida con las mujeres sin nombre.

Por supuesto que Andersen prefirió 19.Tac1 a 19.Ae4; aquella es la jugada de un artista, y esta, la de un carnicero. Se refería a la partida Anderssen contra Dufresne: La Siempreviva.

Cuando le pregunte a Fischer porque no había jugado cierta movida en nuestra partida, el respondió: -Bueno, te reíste cuando la anote.

En el matrimonio la mujer tiene todas las cartas pero pierde la partida.

El amor por algo o por alguien puede tener una contrapartida siempre alejada de la indiferencia: desamor u odio hacia quien no piensa igual o no corresponde a esos sentimientos.

El deseo de tener mas y mas dinero, tampoco me parece del todo sano. La verdad es que las cosas que tenemos nos tienen ellas también a nosotros en contrapartida: lo que poseemos nos posee.

El ajedrez es inagotable. Se han jugado millones de partidas y se han escrito miles de obras, pero hasta ahora no existe fórmula universal ni método que garantice el triunfo.

Es un honor exagerado. Lasker cometía errores en todas sus partidas y yo solamente en una sí y en otra no. Al ser comparado con Lasker.

Si una pieza esta mal, toda la partida estará mal.

No lograr un tanto de mas a costa de lo que fuere, no dejarme llevar únicamente del ansia de vencer, sino jugar partidas artísticas, ricas de fondo, ese era el fin que yo me proponía en los torneos.

La obtención del titulo de maestro fue para mi algo así como un resumen de las victorias obtenidas y derrotas sufridas; con ello se cancelaba la cuenta de la enorme cantidad de horas dedicadas a analizar partidas y aprender las leyes del juego.

No se como podre ganarle seis partidas a Capa blanca, pero tampoco se como podrá ganármelas el a mi.

A mi, cuando veo un muerto, la muerte me parece una partida. El cadáver me da la impresión de un traje abandonado. Alguien se fue y no necesito llevar aquel traje único que había vestido.

El método para ganar consiste en ir alternando el avance del peón pasado con amenazas contra el rey negro. Primero, las blancas deben dominar la importante diagonal a1-h8. Nota: Análisis de la partida 29 por el titulo mundial contra Capa blanca.

En la primera fase de la partida tratas de conseguir ventaja; en la segunda, de consolidarla; en la tercera, sabes que perderás….

¿Quien soy?, ¿Como soy?, Yo no soy como tu. Míster Ego gano la partida, tomo el mando y buscamos re-identificarnos.

Si no ganas, no es una gran tragedia. Lo peor que sucede es que pierdes una partida.

Un deseo es el punto de partida de cualquier logro, no una esperanza, no un sueño, sino un agudo deseo que transciende todo.

Si el adversario ofrece un juego interesante, no me opongo; pero en tales casos obtengo menos satisfacción, incluso si gano, que de una partida conducida según todas las reglas de la estrategia con su lógica implacable.

Cuando le dices lo que debe hacer y te dice "no", creas resentimientos por partida doble. Primero, te sientes ofendido porque no hizo lo que querías. Segundo, la otra persona se ofende porque no la aceptaste como es. Y es un círculo vicioso.

A veces los caballos no saltan, botan. El momento mas importante de la partida es el primer movimiento del alfil….

Cuando jugó 45. h5 no podía creer a mis propios ojos. Última partida del encuentro Gary Kaspárov contra Anatoli Kárpov.

Para cualquiera que examine partidas magistrales, aun de manera superficial, le será obvio que cada gran maestro juega de una manera que le es propia.

Me siento como si fuera una pieza en una partida de ajedrez, cuando mi oponente me indica: esa pieza no puede ser movida.

Lasker pierde de vez en cuando una partida, pero jamás pierde la cabeza.

La paz esta en el punto de partida, en el de llegada y en el intermedio.

Se dice que la ignorancia fundamental es innata, porque es inherente a nuestra existencia; nacemos con ella. Es, de hecho, el punto de partida de la dualidad, la raíz de todos las ilusiones y la fuente de todo sufrimiento.

El punto de partida de cualquier logro es el deseo.

La mayoría de los ajedrecistas saben, gracias al estudio de las partidas de maestros, que dos alfiles son más fuertes que dos caballos o que un alfil y un caballo, aunque muy pocos conocen la razón de esta ventaja y cómo aprovecharla.

El que se preocupa por calamidades, las sufre por partida doble.

Una combinación, y lo imposible se hace posible. Es una chispa divina, como un meteoro que ilumina la partida de ajedrez.

El amor generoso, el pegamento que lo mantiene todo unido en una relación saludable, apunta a la felicidad compartida a través del cumplimiento de la pareja.

Mas vale una partida de Capablanca que una monografía del mas inteligente erudito.

Es curioso este juego del matrimonio. La mujer tiene siempre las mejores cartas y siempre pierde la partida.

En realidad, todos escribimos un solo libro, que va cambiando y se va multiplicando a medida que la vida vive y el escritor escribe. Para mi, Las venas fue un puerto de partida, no un puerto de llegada.

Cuando jugo 45…h5 no podía creer a mis propios ojos. Ultima partida del match Kasparov contra Karpov de Sevilla 1987 R: 1-0.

Si quieres divertirte en una partida haz un apertura abierta, pero si quieres ganar hazla cerrada.

Por tratar de evitar la perdida de una pieza, muchas personas han perdido una partida de Ajedrez.

Nunca se ha ganado una partida abandonándola.

Miles de velas pueden ser encendidas a partir de una sola, y la vida de esa vela no se acortara. La felicidad nunca disminuirá por ser compartida.

Miles y miles de velas pueden ser encendidas a partir de una sola, y la vida de esa vela no se acortara. Así mismo, la felicidad no disminuye por ser compartida.

Se pueden encender miles de velas con una sola vela, y la vida de la vela no se acortara. La felicidad nunca disminuye al ser compartida.

En una partida de Ajedrez a veces juegan mas de cuatro caballos.

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