La iluminación espiritual

Frases Antonio Machado

Citas Antonio Machado


En España, de cada diez cabezas, nueve embisten y una piensa. Nunca extrañéis que un necio se descuerne luchando por la idea.

Nadie debe asustarse de lo que piensa, aunque su pensar aparezca en pugna con las leyes mas elementales de la lógica.

Converso con el hombre que siempre va conmigo. Quien habla solo, espera hablar con Dios un día.

Virtud es fortaleza, ser bueno es ser valiente; escudo, espada y maza llevar bajo la frente; porque el valor honrado de todas armas viste: no solo para, hiere, y mas que aguarda, embiste.

Nunca perdáis contacto con el suelo; porque solo así tendréis una idea aproximada de vuestra estatura.

Después de la verdad nada hay tan bello como la ficción.

Mi filosofía es fundamentalmente triste, pero no soy un hombre triste, y no creo que entristezca a nadie mas.

Peor que ver la realidad negra, es el no verla.

Todos nuestros esfuerzos deben tender hacia la luz.

La pasión del hombre por la verdad es tal que dará la bienvenida al mas amargo de todos los postulados siempre que le parezca cierto.

Toda incertidumbre es fructífera… siempre que vaya acompañada del deseo de comprender.

Dondequiera que el aprendizaje genere especialistas, la suma de la cultura humana se ve reforzada por eso. Esa es la ilusión y el consuelo de los especialistas.

Tu verdad no; la verdad y ven conmigo a buscarla. La tuya, guárdatela.

Hay dos clases de hombres: los que viven hablando de las virtudes y los que se limitan a tenerlas.

Moneda que esta en la mano, tal vez se deba guardar. La monedita del alma se pierde si no se da.

El hombre solo es rico en hipocresía. En sus diez mil disfraces para engañar confía; y con la doble llave que guarda su mansión para la ajena hace ganzúa de ladrón.

Todo pasa y todo queda, pero lo nuestro es pasar, pasar haciendo caminos, caminos sobre la mar.

Poned atención: un corazón solitario no es un corazón.

Cuatro cosas tiene el hombre que no sirven en el mar: ancla, timón y remos, y el miedo a naufragar.

Aquellos que niegan la existencia de la verdad postulan la verdad de su negación y se contradicen a si mismos.

Todo lo que se ignora, se desprecia.

No extrañéis, dulces amigos, que este mi frente arrugada: yo vivo en paz con los hombres y en guerra con mis entrañas.

El manuscrito inédito es como un pecado no confeso que se infecta en el alma, corrompiéndolo y contaminándolo.

Virtud es la alegría que alivia el corazón mas grave y desarruga el ceño de catón.

La alegría consiste en tener salud y la mollera vacía.

Lo que se ignora, se desprecia.

La primavera ha venido, nadie sabe como ha sido.

El bueno es el que guarda, cual venta del camino, para el sediento el agua, para el borracho el vino.

A las palabras de amor les sienta bien un poquito de exageración.

Puestos a elegir entre la verdad y el placer de buscarla, elegiríamos lo segundo.

Evite los pulpitos, plataformas, escenarios y pedestales. Mantente al suelo duro. Es la única forma en que puedes juzgar tu estatus aproximado como hombre.

¿Dijiste media verdad? Dirán que mientes dos veces si dices la otra mitad.

Solo un tonto piensa que el precio y el valor son los mismos.

Desdeño las romanzas de los tenores huecos y el coro de los grillos que cantan a la luna. A distinguir me paro las voces de los ecos, y escucho solamente, entre las voces, una.

No hay nadie tan atado a su propia cara que no albergue la esperanza de presentarle otra al mundo.

Ayudadme a comprender lo que os digo y os lo explicare mejor.

Y en todas partes he visto gentes que danzan o juegan, cuando pueden, y laboran sus cuatro palmos de tierra. Nunca, si llegan a un sitio, preguntan adonde llegan.

Dicen que el hombre no es hombre mientras no oye su nombre de labios de una mujer.

Juzgarnos o corregirnos supone aplicar la medida ajena al paño propio.

Tengo a mis amigos en mi soledad; cuando estoy con ellos que lejos están.

Es el mejor de los buenos quien sabe que en esta vida todo es cuestión de medida: un poco mas, algo menos.

Cuatro principios a tener en cuenta: lo contrario es también frecuente. No basta mover para renovar. No basta renovar para mejorar. No hay nada que sea absolutamente empeórale.

Entre vivir y soñar hay una tercera cosa. Adivínalo.

En la desesperanza y en la melancolía de tu recuerdo, Soria, mi corazón se abreva.

Despacito y buena letra, que el hacer las cosas bien, importa mas que el hacerlas.

Debajo de todo lo que pensamos, vive todo lo que creemos, como el ultimo velo de nuestros espíritus.

En preguntar lo que sabes el tiempo no has de perder… Y a preguntas sin respuesta ¿quien te podrá responder?

De lo que llaman los hombres virtud, justicia y bondad, una mitad es envidia, y la otra no es caridad.

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