La iluminación espiritual

Frases enrique martinez lozano

Citas enrique martinez lozano

1 - El camino espiritual no es otra cosa que reconocer quienes somos y vivirnos conectados a ello. A esto las tradiciones espirituales lo han llamado despertar, un estado de consciencia que se caracteriza por la sabiduría (comprensión) y la compasión.

2 - No nos falta nada, no hay alguien que tenga que ir a algún lado. No hay un lugar adonde ir. Si no nos movemos, ya hemos llegado.

3 - El despertar, en cualquier caso, consiste en reconocer que la Vida o Dios es nosotros. Y que, cuando no ponemos obstáculos a que se viva libremente, lo que aparece es Jesús, el hombre que paso por la vida haciendo el bien.

4 - Nos creemos separados, aislados incluso, y esa es la causa de nuestro sufrimiento.

5 - El yo religioso vera a dios como un Tu. Creas un dios a tu imagen y semejanza.

6 - En cuanto trascendemos el pensamiento, se muestra la No-dualidad de Lo Que Es.

7 - Dios es, lo que es. Se calla la mente, lo percibe el Silencio.

8 - La aceptación trae también consigo gratitud.

9 - No tenemos vida, somos vida.

10 - Entrégate a esas sensaciones que detectas en tu cuerpo. Y tomate un tiempo siendo paciente con las prisas para sentirlas con detenimiento.

11 - Tu no eres nada de lo que pasa; eres Eso en lo que todo pasa. Sabemos que todo es permanente, porque hay Algo que es estable. Todo pasa, porque hay Algo que no pasa. Lo real no cambia; lo que cambia no es real.

12 - No soy ningún contenido de la consciencia, sino la consciencia en la que aparecen –que se expresa en– todos los contenidos.

13 - El conocimiento favorece la emergencia del Yo Soy. La entrega a la Divinidad potencia la unidad en el Yo Soy. La acción desapropiada hace vivir en conexión con el Yo Soy. La compasión se muestra como expresión del Yo Soy.

14 - Podríamos decir que las religiones son las copas; la espiritualidad, el vino; las creencias, las denominaciones de origen de cada vino, y la mística es beber de ese vino hasta embriagarse.

15 - Espiritualidad es la dimensión profunda de todo lo real. Así entendida, es claro que no hay nada que quede al margen de la espiritualidad.